El precio de los productos y servicios de la empresa es una de las políticas de empresa más importantes que se deben decidir en el seno de una organización. El precio fijado por la empresa es la consecuencia de un gran número de detalles estudiados y que afectan directamente a la actividad empresarial, ya que depende de un muchos factores como la producción, los costes, el posicionamiento, la rentabilidad deseada, etc. Por ello, es imprescindible determinar cuál va a ser la política de precios cuando nos disponemos a crear una empresa, además, debe ser coherente con la estrategia general.
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¿Qué son las políticas de precios?
Las políticas de precios son un conjunto de normas y decisiones que se establecen por parte de la empresa para intentar realizar unos estándares generales acerca del precio que deben llevar sus productos y servicios. Entre ellas podemos encontrar la fijación de ingresos que se quiere obtener por cada producto, el margen de beneficios, o los precios máximos y mínimos que se pueden poner a los productos de nuestra empresa por nuestra parte, o parte de terceros que los distribuyan.
Las políticas de precios son fundamentales para el buen funcionamiento de nuestra empresa. Por un lado, determina el punto de equilibrio y permite conseguir los beneficios deseados con nuestra actividad empresarial, ya que pondremos el precio que creamos conveniente para conseguir una rentabilidad concreta. Pero no solo eso, el precio elegido también determinará nuestra estrategia de posicionamiento de mercado, ya que dependiendo de si nuestro precio es muy alto o muy bajo, se dirigirá a un público objetivo u otro.
Objetivos de las políticas de precios
Es evidente que el principal objetivo de la política de precios de una empresa es fijar precios que permitan conseguir beneficios. Sin embargo, no todo es ganar el máximo dinero posible. Existen estrategias que las empresas realizan para alcanzar sus objetivos empresariales, los cuales no siempre se basan en ser el líder del sector.
Por ejemplo, es posible que las empresas en sus inicios quieran poner precios para, simplemente, garantizar su supervivencia y cubrir costes. Por otro lado, pueden tener como objetivo acaparar la mayor parte del mercado o solo dirigirse a un segmento de mercado concreto. También existe la posibilidad de querer garantizar la mayor calidad del mercado en tus productos. Todo ello, afectará a la fijación de precios en tu organización.
Estrategias de precios
Aunque las políticas de precios establecen estándares en los que se debe basar, se pueden utilizar estrategias cambiantes que varien el precio del producto según el objetivo que tenga la empresa en cada momento. Por ello, aquí te mostramos cuáles son algunas de ellas:
- Descremar: en sus inicios las empresa pueden empezar vendiendo caros sus productos debidos a que los costes de producción son muy altos, pero después rebajar ese precio según se vayan fabricando y vendiendo más unidades.
- Penetrar: muchas empresas empiezan vendiendo muy baratos sus productos para captar la atención del clientes y penetrar rápidamente en el mercado. De esta forma pueden desarrollar el mercado en el que se mueven e ir subiendo poco a poco sus precios para conseguir mayor rentabilidad.
- Estabilizar precios: algunas compañías buscan que una estabilidad en los precios de sus productos, de forma que en sus políticas de precios buscan que sus productos se encuentren en todos los lugares posibles con, aproximadamente, el mismo precio.
- Beneficio a largo plazo: las empresas que poseen productos complementarios pueden realizar estrategias de enganche para que sigas comprando de forma continuada. Un ejemplo podría ser una empresa que vende sus impresoras muy baratas, con el objetivo de que después sigas comprando sus cartuchos de tinta.
¿Cómo poner el precio a mis productos?