Después de haber explorado a la generación X y a los millennial, traemos a la generación que comienza a entrar en el mercado laboral: la Generación Z. Son los jóvenes nacidos entre 1998 y 2010, representan un 25% de la población mundial y son la gran incógnita de las marcas y los mercados.

¿Quienes son los Centennials o Z?
Agarraos a la silla. Estos jóvenes son el motor del futuro del trabajo, la nueva fuerza laboral, social y política; y a pesar de su juventud, ya hacen mucho ruido. Los conocerás por ser adictos a las RRSS, utilizan anglicismos como “Oh, my god” o hablan de Netflix, de las stories y del cambio climático.
Impacientes
La paciencia de este grupo brilla por su ausencia. Son la generación con menor capacidad de atención y concentración de la historia. Los anunciantes están tirándose de los pelos intentando dar con fórmulas que enganchen la atención de los centennials: branded content, publicidad nativa, anuncios que parecen películas… La creatividad desbordante de las agencias debe plantear formatos que les enamoren desde el principio, sino… Renunciarán a seguir tu contenido y, por tanto, tu marca.
Los mejor preparados
Surgen entre esta generación una serie de referentes que demuestran su capacidad de autonomía profesional: youtubers, jovencísimos empresarios, influencers… Son una generación que se autoconsidera sobradamente preparada, con un acceso directo al conocimiento en su querido Internet, sus posibilidades de absorber información sobre una temática son prácticamente ilimitadas. Han sabido aprovechar la democratización del conocimiento y formarse en aquello que les apasiona.
Activistas
Muy sonado es el caso de la niña que inició la huelga de clases por el cambio climático. Es solo un ejemplo del potencial de compromiso que adquiere esta generación con su entorno. Son críticos con el trabajo tradicional, con la contaminación, con la política… Y si algo no les gusta, no tienen miedo de gritarlo a los 4 vientos. Esta generación precisa de marcas comprometidas con su entorno y sus procesos, con buenas políticas de RSC, con planes de bienestar laboral y retención del talento.
Autónomos
Son la generación que ha tenido que enseñar a sus padres cómo utilizar la tecnología, porque la entienden mejor que ellos. Nacieron en el 4.0 y tienen mucho que demostrar a sus mayores. En el entorno laboral se desenvuelven en el cara a cara, con soluciones creativas y tecnológicas; aunque pecan de confiados y suspenden en procesos analógicos.
Cómo conectar con los Z
El contenido es la norma. Desde el marketing de influencers, que les atrapa saber que su referente social vista determinada marca o utilice una app concreta, hasta contenidos de tipo entretenido que el usuario aprecia que la marca le acerque. El marketing de contenidos es una de las herramientas que más acerca las marcas y productos al target, evitando que se sienta acosado por la publicidad. O, aún peor, que relaciones la molestia que le causa la publicidad con la marca que aparece.
Tus esfuerzos deben ir dirigidos a encontrar ese equilibrio entre el mensaje que quieres lanzar: hemos sacado este nuevo producto, u ofrecemos determinados servicio, pero siempre poniendo al consumidor en el centro del mismo y preguntándonos: “¿Qué haría él si recibiera esto?”.
A nivel laboral
- Esta talentosa generación está buscando ser feliz en su trabajo
- Buscan grandes remuneraciones y flexibilidad, así como mayor responsabilidad y autonomía
- Les encanta ser partícipes del crecimiento en la empresa, desarrollarse conjuntamente y ver florecer sus logros junto al equipo
- Son amantes del cara a cara, prefiriendo una comunicación personal y directa
- Suelen adaptar la formación a sus necesidades, si no entienden algún concepto, buscan en internet a alguien que lo explique mejor.
Esta generación, incómoda para algunos y sorprendente para otros, ha aterrizado en el mercado para revolucionarlo. Personalistas, idealistas, comprometidos y muy activos; convencidos de que van a cambiar el mundo, no se andan con chiquitas respecto a lo que quieren.
La personalización del producto, la presencia en RRSS y el contenido de marca enamorarán a este público escéptico con las formas tradicionales de hacer publicidad. Por eso, debemos adaptarnos nosotros para conectar mejor con ellos, acercarnos a sus formas de consumo y mantenernos constantemente al tanto de las tendencias. Así obtendremos su fidelidad, que tan cara se paga en los días que corren.