Hoy en día, todos los socios tienen el derecho a salir de una sociedad limitada. Generalmente, este hecho suele producirse cuando hay problemas en la empresa o corre el riesgo de quebrar. A simple vista, puede parecer que existen múltiples formas para dejar de ser socio de una empresa. Sin embargo, no se trata de un proceso tan sencillo. Pero no te preocupes, estamos dispuestos a ayudarte. ¡Sigue leyendo!

¿Puedo desvincularme de una sociedad?
La gran mayoría de socios que deciden desvincularse de una empresa no lo hacen, obviamente, en época de prosperidad. Por el contrario, la búsqueda de formas para dejar de ser socio de una empresa aumenta cuando una crisis acecha. Por suerte, cualquier individuo puede salir de una sociedad limitada de la que es afiliado. Esto se puede hacer de dos formas:
- Vendiendo o cediendo tus participaciones sociales por el precio que consideres conveniente a la sociedad o a un tercero.
- Ejerciendo el derecho de separación de los socios (suele optarse por este camino cuando no se consigue vender las acciones).
Por otra parte, es importante que comuniques tu decisión con respeto. De lo contrario, puedes acabar provocando situaciones tensas en la empresa y, como consecuencia, tu imagen se verá perjudicada. Además, el trato cordial entre socios juega un papel importante. De hecho, es clave si deseas que tu proceso de desvinculación sea pacífico y tranquilo. De esta manera, lo mejor es que tu relación con el resto de socios sea lo más agradable posible. Ya sabes, cuanto más simpático seas, más posibilidades de venta tendrás.
¿Cómo abandonar una empresa de la que soy socio?
Es completamente normal que no sepas cuáles son las formas para dejar de ser socio de una empresa. ¡Te lo contamos! Como ya te hemos comentado en el apartado anterior, existen dos maneras de salir de una sociedad limitada:
1. Vende o cede tus participaciones sociales
Es la modalidad más común de todas las posibles formas para dejar de ser socio de una empresa. Podrás venderlas a la propia sociedad o a compradores externos siempre y cuando el resto de socios estén de acuerdo. No obstante, aunque no estén obligados a comprarlas, los afiliados poseen el derecho de adquisición preferente. Es decir, los miembros de la empresa tienen preferencia sobre los no afiliados a la hora de adquirir estas acciones. Asimismo, puedes negociar el precio y las condiciones de pago con el comprador. ¡Seguro que llegáis a un buen acuerdo!
2. Ejerce el derecho de separación de los socios si no se reparten dividendos
Esta es la única forma de salir de una sociedad limitada cuando ningún individuo ha adquirido tus participaciones. En este caso, la empresa será la responsable de pagarlas. Aunque a simple vista parezca una oferta tentadora, no es tan sencillo. Evidentemente, para ejercer este derecho, hay una serie de requisitos que se han de cumplir:
- debes ser socio de una sociedad limitada.
- la empresa debe llevar inscrita más de cinco años en el Registro Mercantil.
- debes votar a favor en el acuerdo de reparto de beneficios obtenidos de la explotación del objeto social. Esto se votará en la Junta de aprobación de las cuentas anuales.
- la Junta no puede haber acordado el reparto de dividendos (a excepción de que no sobrepase un tercio del beneficio).
El socio dispone de un mes para comunicar el ejercicio de este derecho desde la fecha de la Junta.
Así pues, salir de una sociedad limitada es un proceso largo y costoso. Debemos tener en cuenta que, por lo general, perdemos más dinero del que ganamos. Por ello, es importante tener cuidado a la hora de invertir en acciones. De lo contrario, podríamos arrepentirnos y, como ya hemos visto, el proceso de desvinculación podría suponer un fuerte quebradero de cabeza.