Cuando leemos nuestro contrato de trabajo, hay toda una serie de información que, en muchas ocasiones, puede resultar difícil de interpretar. Uno de los términos que encontraremos en aquél, es el de grupo profesional. ¿A qué se refiere? Se trata de una manera objetiva a través de la cual clasificar a los trabajadores de las empresas. ¿Cómo? En función de sus aptitudes profesionales, de sus capacidades y, en definitiva, del trabajo que van a realizar.
Por ley, se establecen una serie de grupos profesionales para que, de este modo, resulte más fácil su clasificación, ubicación y ordenación.
¿Cómo se asigna el grupo profesional?
Encontramos la definición legal del grupo profesional en el art. 22 del RDL 1/1995 de la Ley del Estatuto de los Trabajadores, el cual dice así:
“Se entenderá por grupo profesional el que agrupe unitariamente las aptitudes profesionales, titulaciones y contenido general de la prestación, y podrá incluir distintas tareas, funciones, especialidades profesionales o responsabilidades asignadas al trabajador.”
La determinación y definición legal del grupo profesional se ha hecho necesaria en el entorno laboral de hoy en día. Con ella, lo que se pretende es llegar a un punto en el que no haya discriminación por puesto laboral, sexo o remuneración.
La vinculación de un empleado a un grupo profesional dependerá de sus aptitudes profesionales, así como de las tareas y funciones que desempeñe en su puesto.
Igualmente, la determinación de un puesto en un grupo profesional concreto, ayudará tanto a empresas como empleados, a conocer cuáles son los derechos y obligaciones inherentes al cargo, establecidos a través del convenio colectivo de trabajadores. De esta forma, se evita cualquier tipo de confusión y malinterpretación entre trabajador y empleado.
Además, sabiendo el grupo profesional al que pertenece el empleado, será más fácil establecer su salario y conocer su cotización a la Seguridad Social.
¿En qué se diferencia el grupo profesional de categoría profesional?
La determinación y elección del grupo profesional de los trabajadores no es algo que se realice al azar. Es una materia que está regulada tanto en los convenios colectivos como en el Estatuto de los Trabajadores anteriormente citado. Antes de la reforma laboral de 2015, no existía la calificación de grupo profesional. Éste se denominaba categoría profesional, concepto ya inexistente.
El grupo profesional, a diferencia de la categoría, es un término mucho más amplio. La categoría era un concepto más rígido. Únicamente tenía en cuenta la aptitud y la capacitación personal del trabajador.
Por el contrario, el grupo profesional va más allá. No sólo se limita a tener en cuenta la aptitud de los trabajadores. También reconoce las tareas y responsabilidades propias del puesto de trabajo a desempeñar en concreto.
La importancia del grupo profesional
La aparición de este término era necesaria para la adaptación de las empresas en general, y los puestos de trabajo en concreto, al entorno tan cambiante y competitivo del siglo XXI.
El grupo profesional, en primer lugar, permite la movilidad funcional. Es decir, evita despidos y permite la fácil adaptación de los puestos de trabajo a las necesidades que van surgiendo en la empresa o a los cambios estructurales de la misma, por ejemplo.
Cada grupo profesional está formado por subgrupos. Cada uno de ellos, comprende un importe mínimo y máximo del salario que puede y tiene derecho a percibir el empleado. De esta manera, el empleado tendrá pleno conocimiento de la cantidad salarial que debe percibir, evitando cualquier abuso por parte del empleador. Podemos saber cuánto ganan los trabajadores según la profesión, gracias a la asignación de los grupos profesionales.
En definitiva, de lo que se trata es de adaptar y crear nuevas figuras y términos que se adapten fielmente a las necesidades de los trabajadores y las empresas. Permitir el cobro de salarios dignos que se correspondan lo máximo posible a la realidad diaria del trabajador.