Uno de los mitos más extendidos del mundo del emprendimiento es asociar las startups con las generaciones más jóvenes. Pero esto está muy lejos de ser realidad, ya que cada vez más vemos que los nuevos emprendedores proceden de grupos que tradicionalmente no se han asociado con el emprendimiento, como los rangos de edad entre 45 y 65 años. Además, muchos estudios de diferentes universidades corroboran como las nuevas empresas fundadas por emprendedores de más edad tienen tasas de supervivencia mayor y más éxito a largo plazo. ¿Es posible que la experiencia sea una ventaja competitiva mucho mayor que la pasión de las generaciones más jóvenes? Repasamos el concepto de emprendimiento senior y todas sus connotaciones.
Significado de emprendimiento senior
El tiempo y la experiencia en los negocios te enseñan a escuchar a los clientes y a evaluar cuidadosamente el potencial real de cada proyecto. Además, los emprendedores senior suelen centrarse mucho más en aspectos importantes, enfocando los recursos en las necesidades reales de los clientes.
Ser capaz de mirar hacia atrás gracias a los años de experiencia es una ventaja para evitar errores comunes, dado que no es lo mismo emprender por primera vez que por segunda o tercera.
Además, para reconocer una necesidad que no está siendo cubierta de forma adecuada en el mercado. Se necesita tiempo para crear redes, conocimientos técnicos y la capacidad de liderazgo empresarial para trazar un camino de éxito.
Ventajas competitivas de los emprendedores senior
La experiencia y el saber hacer son algunos de los beneficios del emprendimiento senior y que puedes aprovechar para darle un mayor potencial a tu idea de negocio. Conoce algunas de las ventajas que te aporta este nivel de emprendedor.
1. Tienes la experiencia necesaria
Como emprendedor senior, tienes más experiencia que la gran mayoría de los fundadores a tu alrededor. Los años de trabajo tanto por cuenta ajena como por cuenta propia son una inagotable fuente de conocimiento, y por lo tanto, sabes bien lo que funciona y lo que no funciona.
Puedes aportar esta amplia experiencia a cualquier proyecto y oportunidad que se presente, ya que ser fundador de un negocio requiere de conocimientos como la gestión del tiempo, la comunicación y el trabajo en equipo.
Todas estas cualidades son necesarias para tener éxito y son habilidades que sin duda ya dominarás. Además, al comenzar un nuevo negocio, un mundo de nuevas experiencias va a surgir, algo que puede suponerte un reto y motivación.
En cualquier proyecto, siempre existe una curva de aprendizaje, y ésta es una gran oportunidad para desarrollar nuevas habilidades. Puede que el marketing y las tecnología sean áreas novedosas o que dominas menos, pero fundar un negocio te permitirá explorar estos nuevos caminos de una forma emocionante.
2. Puedes compartir tu pasión
Para ser fundador de un negocio, tienes que preocuparte realmente por el producto que se vende y por los clientes a los que se ayuda en el día a día, por ello, una parte muy importante de tener un negocio es que el equipo fundador sienta verdadera pasión por lo que hace.
Al tener un negocio, no sólo puedes profundizar en tu pasión, sino que podrás compartir esta pasión con los demás. Compartir lo que te gusta haciendo algo útil para los demás es una enorme satisfacción.
3. Una fuerte personalidad
Como emprendedor senior, has pasado y visto mucho. Como resultado, no sólo tienes la experiencia para demostrarlo, también tienes la actitud. Al haber conocido y trabajado con personas de toda clase, sabes cómo quieres que te traten y cómo tratar a los demás.
Puede que no sepas exactamente lo que buscas con un negocio, pero sí que tienes claras tus prioridades, sabes lo que es importante, sabes cómo delegar y sabes que no debes preocuparte por aquellas cosas insignificantes a largo plazo.
Además, la tenacidad, la capacidad de trabajar duro y la resistencia a las adversidades son herramientas muy poderosas a la hora de tener éxito en un negocio. Tras muchos años trabajando para otras empresas, crear tu propio negocio te da la oportunidad de perseguir pasiones, sueños y poner en práctica muchas de las habilidades adquiridas a lo largo de la vida.
Como fundador tendrás muchas responsabilidades, pero también podrás sentir la satisfacción de dirigir un negocio que sea parte de ti y del que puedas estar realmente orgulloso.
4. Una posición financiera estable
Un empresario busca poner en práctica una idea que haga la vida de los clientes más fácil mientras obtiene un beneficio. Como emprendedor senior, probablemente ya hayas acumulado cierto patrimonio fruto de los años de trabajo anteriores, por ello la visión de cuando y cómo sacar beneficios de la empresa no estará tan motivada por las necesidades diarias como las de un joven emprendedor sin apenas ahorros.
Cuando uno es dueño de su negocio, puede decidir cuánto se lleva a casa, y cuando hacerlo. Casi todas las startups donde mejor pueden utilizar sus ingresos es reinvirtiendo en el propio negocio, no llevándose los beneficios a casa. Por ello, ser un emprendedor senior te da la tranquilidad y la estabilidad para poder pensar, paradójicamente, a más largo plazo que la mayoría de los fundadores.