Si hay algo a lo que realmente temen las empresas es a la sorpresa de recibir de repente una inspección por parte de Hacienda. Las razones pueden ser varias: quizá sea por mero seguimiento rutinario por parte de la Agencia Tributaria, que anualmente realiza inspecciones de manera aleatoria, o porque ésta haya encontrado indicios que le hagan sospechar de algún movimiento realizado en tu empresa durante el desarrollo de la actividad.
Para evitarte problemas futuros, descubre por qué Hacienda puede sospechar de un negocio.
Causas de la inspección de Hacienda
A continuación, detallamos algunas acciones que pueden provocar una inspección de Hacienda:
1. Devoluciones tributarias excesivas.
Al realizar alguna declaración tributaria (ya sea de IVA, de la renta…), la AEAT se encarga de realizar la comprobación pertinente. Sin embargo, en los casos, sobretodo, en los que las devoluciones son elevadas, pueden saltar las alarmas en Hacienda y puede llegar el caso de que soliciten al contribuyente (es decir, a la empresa), el motivo de tal solicitud y obligando a presentar la documentación que lo justifica.
2. Descuadre entre modelos trimestrales y modelos anuales.
Normalmente, se deberá a algún error de cálculo. Hacienda comenzará una comprobación que, en su mayoría, se subsanará con la corrección de los posibles errores que se hayan detectado.
3. Solicitud de NIF intracomunitario.
Otra de las acciones por las que Hacienda puede sospechar de un negocio es porque éste realice la solicitud del NIF intracomunitario para hacer negocios en el extranjero. Generalmente, las inspecciones por este motivo se deberán simplemente por el hecho de realizar una comprobación de datos, aunque deberemos demostrar por qué realmente necesitamos dicho NIF.
4. Solicitar subvenciones y no declararlas.
La Agencia Tributaria posee información sobre todas las ayudas y subvenciones públicas que se otorgan a lo largo del año (beneficiario, cantidad, finalidad, etc.). Hay subvenciones que están exentas de tributación y, por tanto, no deben declararse. Pero hay otras subvenciones que no están exentas, por lo que el contribuyente debe estar atento de su correcta declaración, evitando así una inspección de Hacienda innecesaria.
5. Dejar sociedades inactivas.
Otro de los motivos por los que puedes recibir una inspección de Hacienda es por el hecho de dejar inactiva una sociedad y, acto seguido, crear una sociedad paralela, con los mismos socios, misma actividad y misma sede. Algo sospechoso y que muchas empresas hacen para evitar el pago de deudas pendientes, por ejemplo.
6. No presentar declaraciones.
Si un contribuyente declara todos los años y, de repente, un año deja de declarar, a la Agencia Tributaria le salta una alerta. Esta declaración es obligada, salvo en los casos en los que no se llegue a los límites de renta que obliguen a ello.
Hacienda conoce los datos de las empresas muy bien, por lo que detecta fácilmente a las empresas que cometen fraude.
7. Exceso de gastos deducibles.
Una de las acciones que pueden provocar una inspección de Hacienda es cuando los gastos deducibles exceden a los ingresos. Es algo común, sobretodo, entre los autónomos, que tienden a incluir gastos de ropa, comida, transporte o suministros no relacionados con la empresa. Si Hacienda detecta que el importe excede demasiado, realizará la inspección pertinente.
Ya sabes por qué Hacienda puede sospechar de un negocio a través de este listado de las causas más comunes. Muchas empresas se dejan asesorar por consultorías y asesorías externas para evitar cualquier mínimo problema con la AEAT.
¿Cómo actuar si recibes una inspección de Hacienda?