Normalmente cuando hablamos de temas relacionados con el mundo empresarial, el foco principal de atención se fija en lo que tiene que ver con los asuntos económicos. Pocos emprendedores no reconocen su ignorancia en los temas financieros y recurren a la asesoría para empresas que ofrecen algunos expertos. Pero no se es tan consciente de esa necesidad de ayuda en material legal. Porque ¿de qué se encarga el asesor jurídico en tu negocio? Una vez conozcas la respuesta, no tendrás dudas de su importante papel.
Por suerte, la presencia de un asesor judicial es cada vez más frecuente en la estructura de las PYMES. Y con un papel distinto, porque se ha evolucionado de las consultas puntuales cuando había problemas legales concretos a convertirlo en un agente activo, partícipe del día a día de la actividad empresarial. No se trata tanto de una ampliación de las funciones del asesor jurídico, como de haber advertido las ventajas que proporciona adelantarse a posibles conflictos y evitar entrar en pleitos judiciales.
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Tareas del asesor judicial en la empresa
No hay que se un genio para intuir por dónde se mueve la responsabilidad de un asesor jurídico de empresa. Es quien se encarga de supervisar los asuntos legales para asegurarse de que nuestro negocio no incurre en ningún error o delito respecto a los que dictan las distintas normativas. Dicho esto, sólo es posible comprobar hasta qué punto es trascendental contar con esta ayuda pormenorizando sus principales tareas:
- Asesorar para la constitución de la empresa. Ya desde el primer momento, cuando estamos dando forma a nuestro proyecto empresarial, el asesor jurídico se convierte en nuestra mano derecha. ¿Sociedad Anónima o Limitada? ¿Una Cooperativa? ¿Qué papel juegan los socios y accionistas? Estas son las primeras decisiones que tenemos que tomar y nadie mejor que el experto para que elijamos la fórmula más ventajosa para nuestro negocio. Como es evidente, es quien se ocuparía de las gestiones, modificaciones o de la disolución de dicha sociedad civil o mercantil según el caso.
- Se ocupa de la negociación y posterior redacción de todos los contratos en los que está involucrada nuestra empresa, desde la financiación con una entidad bancaria a la contratación de suministros, los seguros para empresa, acuerdos con proveedores o empleados.
- Defensa de los derechos de propiedad intelectual e industrial. Las patentes, el secreto empresarial, la confidencialidad… temas especialmente delicados y que tienen una influencia directa en el éxito o fracaso de nuestro proyecto.
- Sobrevuela por todos los departamentos de nuestra empresa, estudiando los asuntos legales que afectan en cada caso. Con capacidad no sólo de orientar, si no de emitir informes de posibles cambios que mejorarían su gestión.
- Imprescindible en temas fiscales y para la preparación de cualquier declaración o tramitación con la Hacienda Pública.
Por supuesto, además de toda esta labor preventiva de un asesor jurídico, evitando que tengamos que protagonizar conflictos legales de cualquier naturaleza, serán los que se encarguen de resolver y representarnos cuando no haya más remedio que afrentar una demanda o juicio.
Cómo actuará el asesor jurídico en tu negocio
De todas las funciones del asesor jurídico, la que va a resultar más determinante es la que tiene que ver con el conocimiento en tiempo real de todos los cambios normativos para poder aplicarlos y adaptarlos inmediatamente a las necesidades de tu negocio. Teniendo en cuenta el volumen de leyes y normativas que pueden afectar a una empresa, más si tiene actividad internacional, se hace más que justificado que nuestro asesor judicial se integre y mimetice con los objetivos y filosofía de nuestra empresa.
Se podría resumir en tres palabras ¿de qué se encarga el asesor jurídico en tu negocio? Planificación, control y defensa de los intereses de la empresa desde la perspectiva legal.