El análisis PESTEL nos sirve para conocer el entorno de la empresa, entendiendo por “entorno” los factores que afectan a las seis iniciales de la palabra: políticos, económicos, sociales, tecnológicos, ecológicos y legales. Muchas veces, este acrónimo se limita a los cuatro primeros factores -PEST-, pero nosotros vamos a fijarnos en un análisis PESTEL completo.
El resultado será una radiografía que nos permita conocer el contexto en el que trabajamos y diseñar la mejor estrategia, por ejemplo integrando PESTEL con las fuerzas de Porter de tu plan de marketing. ¡Toma nota!
P: analiza los factores políticos
Una vez diseñado el equipo, preparemos la hoja de trabajo (Excel, pizarra, post-its) y comenzamos el análisis externo de mercado detallando uno a uno los diferentes factores, incluyendo el impacto positivo o negativo que puedan tener a corto, medio y largo plazo. Empezamos con los factores políticos, que incluyen posibles cambios de gobierno, políticas fiscales o legislación, los acuerdos comerciales y tratados internacionales, las guerras y otros conflictos que puedan afectarnos o los subsidios y ayudas a los que podamos tener acceso.
E: profundiza en los factores económicos
Muchas veces los factores económicos van de la mano de los políticos. Aquí hay que evaluar la carga impositiva, el ciclo económico, las tasas de empleo o la inflación que existe. Las empresas que exportan no pueden pasar por alto el proteccionismo de los mercados o la devaluación y reevaluación de la moneda. Otro factor económico importante es el índice de confianza del consumidor, sin olvidar las tendencias en los canales de distribución o el acceso a la financiación que tiene la empresa.
S: estudia los factores sociales
Dentro de los factores sociales se incluyen cuestiones como la cultura y religión, hábitos de consumo y preferencias de los usuarios o sus creencias. El factor religioso puede ser determinante en algunos mercados, igual que los patrones de compra. Aquí también podemos incluir las modas y las opiniones tanto de los clientes como de los medios de comunicación, que juegan un papel clave en la imagen corporativa que transmite nuestro sector. El perfil del usuario (educación, ingresos, edad, donde vive) es otro factor a tener en cuenta para tu estrategia de marketing.
T: explica los factores tecnológicos
Cada día es más importante, ya que el apartado tecnológico no deja de avanzar y cualquier sector se puede ver beneficiado de ello. A la hora de abordar el análisis PESTEL estamos ante el que quizá sea el elemento más complejo de analizar, ya que el progreso tecnológico y su aportación a nuestro sector son impredecibles. Aún así, cuestión como la nueva maquinaria, la impresión 3D, la existencia de incentivos por usar tecnologías o la obsolescencia son aspectos a tener en cuenta a la hora de analizar la tecnología empresarial.
E: identifica los factores ecológicos y ambientales
¿Cómo afecta el medio ambiente a nuestra empresa? El papel del cambio climático puede resultar determinante tanto a corto como medio y largo plazo, pero también hay que analizar el consumo de recursos no renovables, el reciclaje, las emisiones y posibles sanciones, etc. En este apartado también hay que incluir los riesgos naturales: inundaciones, terremotos, sequía, etc.
L: describe los factores legales
No hace falta decir que la empresa debe cumplir con todos los requisitos legales, una legislación que puede cambiar constantemente. La cosa se complica cuando trabajamos en varios países, ya que hay que respetar ambas legislaciones. Cuestiones como la propiedad intelectual, la regulación de nuestro sector, el salario mínimo, la seguridad laboral o las licencias influyen en el día a día de la empresa, y no pueden faltar en nuestro análisis PESTEL.
Una vez hecho el análisis PESTEL, conocerás los factores con un impacto positivo para nuestra empresa y los que pueden resultar dañinos a corto, medio y largo plazo. De este modo, podemos explotar realizar un análisis DAFO y tomar las medidas necesarias para revertir el impacto de los factores negativos o, por lo menos, minimizar los daños causados.