La asertividad en el mundo empresarial se trata de un tipo de enfoque muy empleado en las empresas de la actualidad. Este concepto hace referencia a una estrategia de dirección basado en habilidades de comunicación, decisión, liderazgo y confianza. Normalmente cuando pensamos en la palabra asertividad lo hacemos como una característica de la personalidad pero lo cierto es que se trata de algo de gran importancia en el mundo de los negocios y de la dirección de empresas.
¿Cómo se puede aplicar la asertividad en la dirección de empresas?
Cuando nos comunicamos expresamos sentimientos y emociones a través de nuestra forma de hablar, las palabras que escogemos, nuestros gestos… Esto puede ayudarnos mucho o estar completamente en nuestra contra. Los directivos de las empresas transmiten emociones, de forma directo o indirecta, a la hora de comunicarse con sus empleados. Es por ello que es muy importante que se conozcan bien y que practiquen el autodominio.
Lo primero que debes saber es que la principal herramienta de la comunicación es la asertividad. Pero, ¿qué es exactamente la asertividad? Se trata de una cualidad que permite a las personas actuar en base a sus intereses, defenderse de forma calmada y poder expresar sus sentimientos de forma honesta, sin ejercer derechos personales y sin negar los derechos de los demás. ¿Entiendes ahora por qué es tan importante en el mundo empresarial?
La asertividad se puede aplicar en la forma de dirigir una empresa y puede medirse a través de unos indicadores, estos indicadores se tratan de prácticas y actitudes que definen el papel de cada integran de dentro de la empresa, incluidos todos los directivos. Estas consisten en:
- Capacidad laboral: hace referencia a la concentración, disciplina y buenos hábitos, además del dominio propio. Estos determinan si una persona está capacitada para realizar las tareas que se le han asignado.
- Orientación activa: ser asertivo en cuanto a la orientación de metas implica consciencia del talento propio y del equipo.
- Control de ansiedades: la asertividad se aleja de las reacciones excesivas como pueden ser la frustración, el miedo, la ansiedad… Cuando estas existen de manera descontrolada suele afectar directamente en las labores. Una persona asertiva suele canalizar estas emociones y girarlas a su favor. Un directivo ha de ser experto en poder controlar sus emociones
- Capacidad negociadora: considerada como una de las mejores capacidades directivas. Negociar, al final, implica una gran asertividad. Se ha de saber conversar, llegar a acuerdos, cesiones, pactos… Para ello se ha de tener un gran control de las emociones propias y del contexto en el que se realiza la acción.
- Relaciones interpersonales: gran parte de los despidos se suelen dar por falta de entendimiento entre los trabajadores o de los trabajadores y la empresa. Un trabajador o un directivo asertivo ha de saber comunicarse con los otros con respeto.
¿Cómo despedir a un empleado de forma correcta con asertividad?
A continuación, vamos a darte una serie de consejos para poder despedir a un trabajador con asertividad. Vamos a ponernos en el caso de que se ha realizar un despido procedente demostrable, por el que em empresario extingue la relación laboral de forma unilateral ajustándose a derecho y cumpliendo con las causas y requisitos legales. Aún así, se ha de recordar que todas las personas tenemos sentimientos, por lo que se ha de proceder de la mejor manera posible. Nuestros consejos son:
Piensa en el equipo
Aunque existan motivos que respalden la decisión de ejecutar el despido, este puede resultar un duro golpe, tanto para el trabajador, sus compañeros y la empresa. En este caso hay que pensar en el bien común y realizar el procedimiento de la mejor manera posible para todos, pensando, también, en el equipo que continuará en plantilla.
Respáldate del equipo de RRHH
El equipo de recursos humanos debe estar formado en este tipo de procedimientos, por lo que ha de ser el encargado de ayudar y asesorar. Te recomendamos que el despido y su comunicación sea el último paso de un proceso de valoración y evaluación del desempeño del empleado. Intenta entender primero el por qué de su situación, a veces las bajas de productividad o malas conductas tienen explicaciones y soluciones mucho más sencillas de lo que nos pensamos.
Se breve
Un despido es una situación incomoda y genera malestar. Es por ello que durante todo el proceso se ha de ser claro y directo, explica las causas del despido y recoge el feedback del empleado de forma correcta.
Ponte en los zapatos del otro
Como hemos dicho, a veces todo tiene explicaciones y soluciones. Es importante que trates de conocer las circunstancias personales del trabajador/a del que piensas prescindir, trata de ponerte en su piel y maneja la situación con empatía y respeto. Presta mucha atención a tu forma de comunicarte. Hay muchas formas de terminar bien una relación con un empleado pese a que sea despedido. Hasta ha habido empleados que han sido despedidos pero dada su valía y sus años de dedicación en la empresa se han ido con una carta de recomendación de cara a su nueva búsqueda de empleo.
Cuida la comunicación con la compañía
No trates el despido como una cosa única entre el empleado/a y tú, un despido afecta a TODA la compañía. Después de realizar el despido es importante que realices un buen trabajo de comunicación interna, explica las razones del despido de forma correcta y mostrando respeto, evita titubeos y se claro. Lo importante en este momento es que seas transparente con la situación y des al resto de empleados la información y seguridad que necesitan.