Las cifras que aparecen en los estados financieros de una empresa son informativos, pero para detectar tendencias y compararse con los competidores, necesitaremos ir un paso más allá y observar la relación entre esas cifras. Ahí es donde encontramos los ratios financieros. Los ratios cuentan una historia más completa sobre la salud financiera de una empresa que los números por sí solos.
¿Qué son los ratios financieros?
Estos ratios establecen una comparación entre dos números que pueden revelar cómo funciona una empresa, varios aspectos de su salud financiera y cómo se encuentra el balance de situación en relación con su sector.
Los ratios financieros proporcionan una medida objetiva del rendimiento de nuestra empresa en el pasado, el presente y el futuro para ayudarnos a determinar el crecimiento y seguir obteniendo beneficios.
Es importante comparar los ratios financieros con los de meses, trimestres y, sobre todo, con los mismos periodos de años anteriores. Cada ratio ofrece una visión diferente de la empresa, mostrando tanto las mejoras como las áreas de posible preocupación.
Los ratios financieros son más eficaces en cuatro áreas de la empresa: Rentabilidad, Capacidad de pago de facturas a corto plazo, Capacidad de endeudamiento y Eficiencia.
Un ratio financiero es simplemente la relación entre dos números extraídos de los estados financieros de una empresa. El ratio se genera dividiendo una cifra entre la otra. A veces, los ratios utilizan cifras del mismo estado, por ejemplo la cuenta de resultados o de estados financieros diferentes, como el cuenta de resultados y el balance.
Tipos de ratios financieros y sus características
Hay tantos ratios como aspectos a controlar y visibilizar en los resultados de una empresa, por ello, hemos seleccionado los más relevante para tener una visión rápida y completa de la situación de nuestra empresa.
Hay cuatro tipos de ratios financieros
• Los ratios de rentabilidad, que el nivel de beneficios de la empresa.
• Los ratios de apalancamiento que indican el grado de endeudamiento de la empresa.
• Los ratios de liquidez que indican si la empresa tiene suficiente efectivo
• Los ratios de eficiencia que indican la eficacia con la que la empresa utiliza sus activos.
Los distintos ratios indican cosas diferentes, lo que significa que un ratio alto no es necesariamente bueno o malo. Para algunas medidas, un ratio alto es lo deseable, pero para otras, un ratio bajo es mejor.
1. Ratios de rentabilidad
• El margen bruto mide el beneficio bruto como porcentaje de las ventas e indica cuánto beneficio bruto se obtiene por cada euro de ventas netas.
• El margen de explotación mide el beneficio de explotación como porcentaje de las ventas e indica cuánto beneficio de explotación se obtiene por cada euro de ventas.
• El margen neto mide el beneficio neto global como porcentaje de las ventas netas e indica cuánto beneficio neto se obtiene por cada euro de ventas netas.
• El rendimiento sobre los activos (“ROA”) mide el beneficio neto como porcentaje de los activos totales e indica la eficiencia con la que se utilizan los activos para generar beneficios en el negocio.
• La rentabilidad sobre los fondos propios (“ROE“) mide el beneficio neto como porcentaje de los fondos propios totales e indica cuánto beneficio neto se obtiene por cada euro de fondos propios invertido en la empresa.
2. Ratios de liquidez
• El Ratio Corriente (Current ratio) mide si hay suficientes activos corrientes para pagar todos los pasivos corrientes a su vencimiento. Normalmente, un ratio de 2:1 es un buen ratio actual para la mayoría de las empresas, ya que indica que hay 2 euros de activos corrientes por cada euro de pasivos corrientes.
• El ratio rápido o de prueba ácida (Quick ratio) mide la liquidez inmediata a corto plazo basándose en si hay suficientes activos corrientes líquidos para pagar todos los pasivos corrientes a su vencimiento. Normalmente, un ratio de 1:1 es un buen ratio rápido para la mayoría de las empresas, ya que indica que hay 1 euro de activos corrientes líquidos para pagar cada euro de pasivos corrientes.
3. Ratios de endeudamiento
• El ratio deuda-capital (Debt to Equity ratio) mide la deuda total pendiente, tanto a corto como a largo plazo, en comparación con el capital total de los propietarios de la empresa. Indica cuánta deuda hay en comparación con cada euro del capital total de los accionistas. Por lo general, un ratio de 2:1 está bien en tiempos de crecimiento económico, pero un ratio más bajo es aconsejable en tiempos más difíciles.
• El ratio de cobertura de intereses mide la capacidad de pago de intereses determinando cuántas veces el beneficio operativo cubre el pago de intereses de los préstamos existentes y de los nuevos proyectados.
• El Ratio de Cobertura de Pagos Fijos mide la capacidad de realizar los pagos tanto de los préstamos como de los activos alquilados. Los banqueros suelen querer que el ratio de cobertura de pagos fijos sea similar al ratio de cobertura de intereses antes de ampliar la financiación adicional.
4. Ratios de eficiencia
• El ratio de rotación de activos se trata de un indicador clave de cómo la inversión de una empresa en activos (una nueva fábrica, por ejemplo) le está ayudando a generar ventas.
• El ratio de rotación de existencias indica cuántas veces se ha utilizado el inventario de una empresa en un periodo de tiempo determinado. Un ratio de rotación de existencias alto suele ser mejor que uno bajo, aunque hay excepciones a esta regla. Un ratio alto podría indicar unas ventas enormes, pero también podría significar que la demanda del producto o servicio de una empresa supera la oferta.
• El ratio de días de inventario es un ratio del inventario medio durante un periodo de tiempo dividido por el coste de las ventas por día. Este ratio es un indicador clave de cómo está gestionando la empresa su inventario.
Averigua cuál es el tipo de ratio financiero más adecuado para tu empresa
Los ratios financieros muestran una fotografía de tú empresa en un momento dado. Esto es útil, pero para sacar el máximo partido de los ratios financieros, es mejor centrarse en las tendencias y cambios a lo largo del tiempo, en lugar de calcularlos una vez para intentar determinar si los resultados son buenos o malos.
Dedicar un tiempo a mirar tus ratios y a evaluar la salud de tu negocio puede ayudarte a planificar y, posiblemente, a evitar situaciones negativas que puedas experimentar.
Las tendencias de crecimiento pueden ayudarte a analizar los cambios y los ratios más importantes para tener en cuenta en tu negocio, así como el impacto de los nuevos productos y los cambios de estrategia. Son especialmente útiles los ratios de rentabilidad, liquidez y endeudamiento.
Así como comparar las ventas y los costes/gastos del periodo anterior con el periodo actual y el riesgo de solvencia a corto y medio plazo para identificar posibles problemas.