A menudo, utilizamos la estimación por horas para estimar cuánto nos llevará una tarea. Y seguro que más de una vez te has encontrado con que la estimación era errónea. Se trata de un método muy arriesgado e impreciso, lo que afectará no solo el desarrollo del proyecto que tenemos entre manos, sino que también lo hará con los siguientes. Por eso, hay que buscar alternativas más eficientes. Es el caso de los story points, uno de los recursos que nos ofrecen las metodologías agile de gestión de proyectos y que deberías conocer.
Qué son los story points
Los story points, también conocidos como puntos de historia, son una unidad de medida empleada para estimar la carga de trabajo total de los equipos. De este modo, nos resulta más fácil planificar los diferentes sprints o iteraciones de cada proyecto de forma eficiente. Para utilizarlos, necesitamos dividir el trabajo en historias de usuario. A partir de ahí, podemos asignar una serie de story points a cada tarea y calcular cuánto tiempo nos llevará completarlo. Lo haremos con base en los siguientes parámetros:
- El volumen del trabajo a completar
- La complejidad de las tareas a realizar
- Los riesgos e incertidumbres que pueden obstaculizar su finalización
- Las capacidades técnicas del equipo
Todos estos parámetros tienen una influencia directa sobre el esfuerzo que haremos y el resultado que obtendremos. A la hora de asignar los puntos de historia, es importante la experiencia anterior en proyectos similares. De este modo, seremos más precisos. Otro aspecto a tener en cuenta es que todos los puntos tienen el mismo valor traducido a tiempo. Así, si una tarea con un story point tiene una duración de 2 horas, una tarea con dos story points durará 4 horas; tres story points serán 6 horas, etc.
Diferencias entre story points y estimación por horas
Quizá te parezca que los story points son algo abstractos. Sin embargo, es un método más específico que la estimación por horas. La gran diferencia es que tiene en cuenta todos los factores que afectan al desarrollo de la tarea, y no depende de la persona que la desempeña. Cuando hacemos una estimación por horas, nos basamos exclusivamente en las capacidades del trabajador. Pero… ¿qué pasa con los factores que pueden afectar a su ejecución? La complejidad o los riesgos no se valoran.
Cómo calcular los story points
Antes del cómo, hay que responder al cuándo. Los story points se asignan en el backlog, antes de cada sprint. De este modo, conocemos las user story prioritarias para el cliente y le podemos dar la importancia que se merecen. El sprint tiene una duración limitada, y es en este contexto cuando se estima el esfuerzo a realizar. Cada empresa o proyecto tiene sus propios valores, pero hay una serie de máximas que no debes romper:
- Cada historia tendrá un número X de puntos, independientemente de su naturaleza
- Cada story point tendrá el mismo valor en los diferentes sprints. Nunca se lo cambiaremos
- No importa el número de story points otorgados, sino la proporción de los mismos
Fibonacci es el método más habitual para calcularlos. Es una sucesión donde se suman los dos últimos números para obtener el resultado siguiente (1-2-3-5-8-13-21-34-55-89…). A más valor, se vuelve más imprecisa, lo que refleja la incertidumbre de los proyectos a gran escala. Una vez se ha decidido cuántos story points habrá, se establece la línea temporal para el escenario del usuario. En este punto se estima la capacidad de cada trabajador para ejecutar un punto de historia, lo que nos permitirá conocer el tiempo exacto necesario para completar la tarea gracias a los story points.