La clave para ser un empresario con éxito consiste en tener la capacidad de visión, de darse cuenta cuándo es el momento de dejar el negocio. Sin embargo, no es una decisión fácil, pero es mejor que inyectar más tiempo y dinero en una empresa en fase de declive. Por lo tanto, se trata de reducir las pérdidas, aprender de los errores y atreverse con el siguiente reto empresarial.
No obstante, si aún no estás seguro de que tu negocio está en serios problemas, presta atención a los siguientes signos reveladores.

Factores que muestran el declive empresarial
Estos son algunos de los aspectos en los que te puedes fijar para saber si tu empresa se está yendo a pique y tomar las decisiones que creas conveniente.
Pocas ventas
Es la primera y más obvia señal de alarma, la cual te avisa de que te encuentras con una empresa en fase de declive. Esto puede deberse a que no se llegue a las ventas esperadas, o haya una disminución en las ventas a diferencia con el trimestre anterior. Asimismo, tu negocio no puede tener éxito sin un ingreso estable para pagar todos los gastos.
Por consiguiente, cuando notes que tus ventas se han minimizado, necesitas localizar rápidamente el problema. Luego, comienza encuestando a tus empleados y clientes, realizando un análisis competitivo y examinando el entorno exterior; así como, los cambios sociales o los desastres naturales.
Nadie habla sobre tu negocio
De la misma manera, te encontrarás con una empresa en fase de declive si nadie la menciona en las redes sociales, no dejan comentarios, o nadie se pone en contacto con el servicio al cliente. Esto se debe, a que no estás interactuando adecuadamente con tu audiencia, entonces, no te prestan interés, ni les importa.
Por ende, haz un esfuerzo para llegar a tus clientes pidiéndoles que dejen opiniones y aumente su compromiso con tu negocio en las redes sociales.
Ofrece algo único
Tu negocio necesita destacar de entre sus competidores. Luego, tómate un momento para anotar todas las características que dan forma a tu negocio, por ejemplo: productos y servicios. Después, compáralo con todos aquellos negocios similares de la industria. Si existen diferencias con tus principales competidores, entonces, gozarás de tener una ventaja competitiva. En caso contrario, deberás trabajar por conseguir esa ventaja que te coloque por delante de la competencia.
Rotación y renovación de personal
Es posible, que tus empleados se den cuenta antes de que están trabajando en una empresa en fase de declive. Debido a cambios en la forma de ser remunerados, o directamente no confían en su marca, además de sentirse frustrados con la administración de su negocio. Por lo tanto, es importante identificar la causa principal del alto reemplazo de empleados.
Definitivamente, cuesta más dinero contratar y capacitar a nuevos empleados que mantener (retener) la plantilla actual. Consecuentemente, las cosas pueden volverse aún más difíciles si además se posee un presupuesto limitado para reemplazar a empleados. Eso significa que ya solo te queda esperar y suponer que el ya frustrado y sobrecargado personal haga más trabajo por ti.
Graves problemas de liquidez
El flujo de caja es el dinero que entra y sale de tu negocio. Indudablemente, el flujo de liquidez ha de ser positivo para que una empresa subsista. En pocas palabras, esto significa que estás aportando dinero suficiente para hacer frente a todos tus gastos.
Sin embargo, los principales problemas de liquidez se deben a deudas, contabilidad ineficiente, crecimiento acelerado sin una previsión precisa sobre tus ganancias y los gastos futuros… Entonces, existen indicios obvios de que tu negocio está sufriendo. Si no se trata correctamente, no esperes mantener tu negocio abierto por mucho más tiempo.
¿Qué hacer para salvar a tu empresa?
Estos cinco consejos te ayudarán a clasificar eficazmente tus prioridades cuando te encuentres con una empresa en fase declive. Aunque, no esperes hasta que sea demasiado tarde y actúa para tomar medidas.
- Asegúrate de que tienes una contribución variable positiva.
- Planifica el flujo de caja con cuidado.
- Reduce gastos. Aprende cómo eliminar productos no rentables que tengas en la empresa.
- Prioriza tus cuentas por pagar.
- Comunícate con los acreedores.
Ahora que ya sabes cómo reconocer que tu empresa está en declive te recomendamos que estés constantemente alerta para conseguir detectar a tiempo estos problemas y puedas aplicar soluciones que permiten poner fin a la sangría, antes de que sea demasiado tarde.