Uno de los aspectos que más cuidado deben tener las organizaciones para seguir siendo competitivas es el de la formación empresarial. La formación permite que los empleados vayan actualizando sus conocimientos y adquieran nuevas habilidades, con el objetivo de mejorar sus competencias y poder realizar sus funciones dentro de la empresa. Sin embargo, la formación no debe centrarse en acciones aisladas que solucionen situaciones concretas, sino que debe realizar una estrategia que permita el diseño de un plan de formación continua para tener un equipo totalmente preparado.
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¿Qué es un plan de formación?
Un plan de formación es el conjunto de acciones destinadas a mejorar las cualidades y habilidades de los empleados de una organización con el objetivo de seguir siendo competitiva, incluso mejorar la productividad empresarial, y no quedarse atrás en relación a los competidores y a las exigencias del mercado actual.
Actualmente, el ámbito empresarial y económica está en constante cambio. Por ello, es fundamental tener una planificación que permita desarrollar acciones de formación continua para tener una plantilla competitiva. Es necesario, contar con un plan de lifelong learning, diseñar programas de formación que vayan mejorando las destrezas de los trabajadores poco a poco. Esto se debe a que si una empresa se queda obsoleta, formar a todos los trabajadores e introducirlos en mundos nuevos para ellos, puede convertirse en un proceso lento que retrase la actividad de la empresa de forma notoria. Por ejemplo, una empresa puede realizar formaciones cada 6 meses para enseñar a sus empleados nuevas herramientas o procesos de trabajo con los que ser más eficiente.
Objetivos de un plan de formación
Los planes de formación poseen grandes beneficios para las empresas. En definitiva, se trata de conseguir que los trabajadores sigan formándose, puedan cumplir con sus funciones continuamente y sepan adaptarse a los cambios que exige la empresa en el día a día. Sin embargo, la formación empresarial ofrece más beneficios a parte de eso. Entre los objetivos por los que se desarrolla un plan de formación encontramos.
- Solucionar deficiencias de los empleados en sus puesto de trabajo
- Mejorar aptitudes de los trabajadores
- Aumentar el rendimiento de la empresa
- Nuevas oportunidades para los trabajadores y la empresa
- Mejora la calidad de vida laboral
- Aportar nuevos conocimientos a la plantilla
- Cambiar actitudes de los empleados
- Crear trabajadores polivalentes con diferentes habilidades
- Mayor satisfacción personal de cada trabajador
¿Cómo hacer un plan de formación?
Ahora que ya conoces la importancia de la plan de formación de una organización, es momento de saber cómo hacerlo. Por ello, aquí te mostrar los pasos para realizar un plan de formación efectivo que te permita conseguir los objetivos formativos que posee tu empresa:
- Diagnóstico y análisis de la situación: en este punto debemos determinar en qué situación se encuentra la empresa en relación a las necesidades que se tienen. Para ello, es necesario saber cuál es el nivel de conocimientos y habilidades de la empresa, y qué es lo que se necesita para ser competitivos y eficientes.
- Diseño de plan de formación: a raíz del análisis de la situación se debe plantear una estrategia de formación que permita que los empleados cumplan con los requisitos exigidos en su puesto de trabajo. Debemos tener en cuenta la adquisición de conocimiento, desarrollo de actitudes, las tendencias en e-learning y las nuevas habilidades necesarias.
- Implementación de la formación: se centra en la parte más táctica y concreta de la formación empresarial. Se determina las horas de formación, el momentos en que se realiza, contenidos, modalidad, etc.
- Evaluación de resultados: tras la realización de la formación, cabe estudiar cuáles han sido los resultados de todo el proceso. Es necesario ver si se han cumplido los objetivos planteados y evaluar tanto los resultados cuantitativos como los cualitativos. Los principales indicadores para estudiar los resultados se centran en el aprendizaje, satisfacción del personal, transferibilidad y ROI.
- Resultado final: Tras todo el proceso es momento de realizar el seguimiento de los resultados de la formación, basándose en la eficacia de la formación y el aprendizaje. Todo ello para saber si ha sido rentable realizar la formación, ha servido para la empresa y tener en cuenta mejoras para futuros planes de formación.
Ahora que ya sabes qué es y cómo se hace un plan de formación, es conveniente que te plantees las necesidades de formación que posee tu empresa y pienses en las posibles estrategias a seguir para mantener una plantilla competitivo que te permite una actividad empresarial óptima.