La palabra commodities hace referencia a las materias primas, mercancías o productos genéricos. En su forma plural, commodities, aluden a productos que cuentan con un valor concreto a nivel productivo que a nivel comercial.
Asimismo, es un término que suele emplearse para referirse a marcas o productos similares en cuanto a tamaño, precio, apariencia o calidad. Apenas es posible saber si el producto está fabricado en el mismo país donde se comercializa o en otro lugar. Esto es lo que suele suceder con productos como petróleo, cobre, oro, trigo, etc.
¿Qué son los commodities en marketing?
En el ámbito del marketing, los commodities están relacionados con aquellos servicios que casi no cuentan con especialización o diferenciación. Se suelen utilizar en estrategias integrales para campañas de todo tipo de negocio.
Un ejemplo de estas estrategias son: las ofertas 2×1, la música ambiental, los plazos de entrega que si no llegan a la hora te regalan el pedido, etc. Este tipo de iniciativas se pueden utilizar en cualquier empresa, independientemente del sector al que pertenezca.
Otra de las acepciones que se le puede atribuir a las commodities son aquellas estrategias utilizadas en productos homogéneos que no tienen casi diferenciación. A modo de ejemplo, podemos citar los iPhone de Apple. En este caso lo que se hizo fue potenciar las estrategias de diseño y marketing con el fin de lanzar productos de culto. De ahí que los usuarios tengan un gran engagement ya solo con la marca, que está como la mejor valorada del mundo.
Características
- Tiene un papel fundamental en la economía.
- Sus precios son volátiles y los márgenes ajustados.
- Tienen mercados organizados que influyen en el precio.
- La comercialización es a escala global o internacional.
- Los estándares de calidad son fijados por la ley o por la industria. Tienen establecido un mínimo de calidad con el que sí o sí hay que cumplir. Es decir que si no se acatan estas normas no será posible comercializar el producto.
Estrategias de marketing para commodities
Existen diferentes estrategias de marketing para commodities. Pero todas ellas tienen en común que para que sean exitosas debe elaborarse un plan de marketing detallado. En él deberán describirse los puntos más fuertes respecto a lo que los diferencia del resto que se encuentra en ese mismo nicho de mercado.
También es importante comprobar qué tipo de campañas ha creado la competencia. Algunas de las estrategias a tener en cuenta son:
- La campaña ha de ser creativa e innovadora. Esto supone romper los estándares de tamaños y formas.
- Emplear herramientas de storytelling para hacer que el producto destaque.
- Estudiar los clientes. Pensar del mismo modo que lo haría nuestros clientes.
- Tener claro qué es lo que se quiere comunicar.
- Aprovechar las tecnologías. Por ejemplo, crear un código QR de un producto en el que se detallen todas las virtudes del mismo.
- Destacar la calidad del producto, con un sello de calidad o una denominación de origen.
- Diferenciarse de la competencia. Nos podemos basar en la confiabilidad, la personalización, un buen soporte postventa… En definitiva, se trata de aportar un valor añadido a ese producto o servicio. Dicho de otro modo, habría que encontrar la respuesta a la siguiente pregunta: ¿por qué han de comprarnos los productos y no a la competencia?
- Colaborar con otros profesionales de otros sectores e inspirarnos en ellos para generar nuevas ideas.
- Cambiar la percepción que tienen los usuarios de la calidad de un producto.
- No basar la oferta únicamente en el precio del producto. Se deberá hacer hincapié en otras características que inspiren una mayor confianza en el cliente.
Debemos de tener en cuenta que una estrategia o gestión efectiva commodites necesita tiempo para su desarrollo, así como su monitorización constante una vez implantada.