Si estás pensando en montar una empresa seguramente te asalten infinidad de dudas. Pero también es casi seguro que todas las dudas que se plantean deriven en una inquietud principal: ¿es mi idea de negocio viable? Para ello, el plan de negocio y el plan de viabilidad son imprescindible para sacar algo de luz sobre esta cuestión.
Es imposible que puedas llegar a una conclusión para esta cuestión a ciencia cierta, pero sin lugar a dudas las teorías y prácticas económicas ponen a tu disposición los instrumentos y herramientas adecuados para que puedas aproximarte a tener una visión bastante certera de si tu idea de negocio será más o menos viable.
Ejemplos de estos instrumentos son el plan de negocio de una nueva empresa y el estudio de viabilidad de un proyecto empresarial. Aunque puedan parecer instrumentos gemelos, tienen sus marcadas diferencias. ¿Sabes cuáles son?
¿Es lo mismo plan de negocio y plan de viabilidad?
Como decíamos existen diferencias entre lo que es un plan de viabilidad para la creación de una empresa y lo que es un plan de negocio al uso. Así que no, no es lo mismo plan de negocio que plan de viabilidad.
La principal diferencia entre el plan de negocio y el estudio de viabilidad es que el plan de viabilidad se refiere a los estudios que se realizan previamente en relación con la viabilidad general del proyecto de empresa. Mientras que, por su parte, el plan de negocio se refiere a una descripción más detallada del modo en el que va a operar la empresa y de la manera en la que va a obtener sus beneficios.
¿Cuál es la diferencia entre plan de negocio y estudio de viabilidad?
Cada plan precisa un tipo de información, que detallamos a continuación.
Los planes de viabilidad necesitan empezar por una presentación del proyecto, un resumen y comentarios. Además, deben incluir una evaluación de la demanda para el proyecto, con el estudio de mercado, competencia y comportamiento de los consumidores potenciales.
El estudio del ajuste a los objetivos empresariales y las políticas oficiales más relevantes también es un contenido que debe estar presente en los planes de viabilidad, al igual que una correcta y completa evaluación de las propuestas del proyecto.
Un punto muy importante que también tiene cabida en este tipo de documentos es la evaluación de los beneficios del proyecto. Por último, este instrumento de apoyo debe contar de igual modo con un apartado de pronósticos financieros y valoraciones.
Por su parte, un plan de negocio al uso deberá contener información más precisa. Además, de comenzar con un apartado de presentación en el que se dan las pinceladas básicas sobre el origen y alcance del proyecto, se debe contextualizar para dar una idea del nicho de mercado que se pretende cubrir.
Este documento también debe incluir los valores y principios clave del proyecto. Al mismo tiempo, el plan de negocio debe analizar las propuestas en detalle para dar muestra de la solidez del proyecto y el análisis que hay detrás de él.
Por otro lado, esta herramienta tan útil para aquellos que deseen emprender, debe incluir un apartado dedicado exclusivamente a la administración y las estructuras legales a adoptar según la naturaleza del proyecto.
Asimismo, este documento debe tener un perfil eminentemente financiero, que incluya los costes en detalle, las fuentes de ingresos con la que se prevé contar, un análisis de sensibilidad y liquidez del mercado, así como también debe incluir las diferentes perspectivas de inversión.
Tampoco se puede descuidar en este plan el apartado dedicado a las cuestiones legales y reglamentarias que tan importantes son a la hora de poner en funcionamiento una actividad económica. Todas estas decisiones se plasman en el plan jurídico-mercantil de la empresa, donde se estudian todas las posibilidades.
Los recursos que se necesitan y aquellos de los que se disponen también constituyen un punto vital en este plan de negocio, un documento que quedará completado con la incorporación de un calendario de actuaciones.
Ahora que ya conoces la diferencia entre el plan de negocio y el plan de viabilidad, es momento de estudiar las posibilidades de éxito de tu idea de negocio. Para ello, te recomendamos que consultes toda la información sobre el plan de viabilidad de una empresa y cómo realizarla.