Como sabéis, una de las plataformas principales para buscar trabajo actualmente es Linkedin. Ahora viene lo desconocido y lo ignorado por la mayoría de los usuarios que están en esta red social. No solo sirve para descubrirte ante el mercado laboral, sino que además, es la herramienta ideal para crear tu marca personal profesional. También tener en cuenta que Linkedin es el mayor blog de contenidos profesionales del mundo, sirve como herramienta de prospección de clientes y muchas más utilidades que podrás sacarle partido y que no sabías.

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La herramienta destacada de Linkedin: El perfil
LinkedIn nace como red social a finales de 2002. Creada por Reid Hoffman, el objetivo era crear una red social que pusiera en contacto a profesionales y empresas, sirviera para la búsqueda de empleo, captar talentos y identificar oportunidades de negocio mediante networking online. Todo esto a nivel mundial.
La mayoría de los usuarios enfocan el perfil a la búsqueda de empleo, no suelen completar el perfil correctamente y no aprovechan el potencial que les puede ofrecer la red social. Pero, ¿qué importancia tiene desarrollar la marca personal en Linkedin?
Tener el perfil correctamente estructurado y elaborado es esencial para el desarrollo de la marca personal en esta plataforma. Te va a permitir posicionarte mejor como experto y llamará más la atención sobre el resto de los perfiles. Por eso estudiaremos cómo elaborar un perfil paso a paso, y que nos garantice resultados a la hora de crear nuestra marca en la red social.
La foto
Es lo primero que verán de ti. Siempre dicen que una imagen vale más que mil palabras, así que tendrás que cuidar tu imagen hasta el mínimo detalle y mostrar tu mejor cara. Es recomendable tener un aspecto muy cuidado, ser formal y evitar por ejemplo realizarse selfies o poner una imagen donde salga más gente. Debes salir en solitario y que se te muestre bien, elegante y sobre todo sonriente. Transmitir seguridad, positividad y responsabilidad es primordial a la hora de escoger tu foto de perfil.
El titular
Es una de las partes del perfil que destaca principalmente por su visibilidad (justo debajo del nombre). Debes realizar una breve y clara descripción de lo que haces, intentando crear un alto impacto y atraer. Algo muy importante que no debes olvidar es poner tus palabras clave para posicionarte (realiza un estudio previo de las palabras clave para tu sector).
Información de contacto
Siempre es importante poner algún dato de contacto, ya que, si hay alguien interesado en ti, quizás te envíe una propuesta o quiera ponerse en contacto contigo por alguna otra razón de negocios. Puedes poner datos de contacto como el teléfono, el correo electrónico y otros datos como la localización física para el que quiera presentarse ante ti personalmente.
Extracto atractivo
No es lo mismo que el titular. No solo le cuentes tu experiencia, ya que para eso existe su debido apartado más adelante. Aquí es donde tienes que realizar una breve historia sobre quién eres, a qué te dedicas y qué es lo que puedes aportar. Intenta captar al lector para que le apetezca seguir leyendo, conectar contigo o incluso iniciar una relación laboral. Debes sacar tu potencial creativo y, además, también incluir las palabras clave para aparecer en las búsquedas profesionales de tu sector.
Experiencia profesional
Una vez hayas captado la atención, lo siguiente que van a ver es tu experiencia profesional. No es importante la cantidad de sitios o proyectos en los que hayas estado trabajando, sino en la calidad de los mismos. Intenta poner de experiencia aquello que crees que es relevante a la hora de ejercer como profesional. Por ejemplo, si eres experto en finanzas, a nadie le interesa que hayas estado trabajando en un restaurante de camarero, pero sí que le interesará conocer que has estado trabajando como contable en una empresa o por ejemplo en banca. Focaliza tu experiencia al sector en el que quieres destacar.
Educación
Resumir los pasos más destacados en materia de educación. No es necesario poner que te has sacado el graduado escolar si eres un experto en finanzas con una larga trayectoria profesional. Destaca solo aquella formación más relevante relacionada con tu actividad y que sirva de interés a los stakeholders.
Aptitudes y validaciones
Aunque la gente no le da importancia o no sepa de las funciones de este apartado, es muy importante resaltar tus habilidades profesionales en el perfil. Linkedin te da la posibilidad de añadir hasta 50 habilidades, lo que supone información para la persona que está interesada en tu perfil, ya que de esta forma puede ver qué cualidades tuyas son las que destacan sobre el resto. Además, que tus contactos validen las habilidades, te dará una mayor credibilidad delante de tus grupos de interés. Así que es importante tener bien elaborado este apartado, y a ser posible, que los contactos con los que hayas tenido relación tanto personal como laboral validen estas.
Cursos, idiomas, proyectos, logros...
Destaca aquellos idiomas que dominas, y a ser posible, las certificaciones que posees sobre estos. También puedes poner los proyectos en los que estás trabajando actualmente y añadir cursos que hayas realizado, que puedan ser de utilidad a la hora de desempeñar tu trabajo. No menos importante es incluir los logros y premios que hayas conseguido referente a algún concurso, proyecto o en tu formación.
Edita la URL de tu perfil
Cuando creamos la cuenta por defecto, aparece nuestro nombre acompañado de una serie de números. Puedes personalizar la URL, de forma que solo aparezca el nombre, y así posicionar mejor el perfil en los buscadores. Además, te aportará una mayor profesionalidad y será mucho más sencillo recordarla.
La red de contactos es esencial para desarrollar la marca personal

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Ya perfeccionada la primera herramienta básica de Linkedin, el perfil, vamos a ver el siguiente paso de cómo abrir camino a nuestra marca personal entre los usuarios de la red.
La base de toda red social son los contactos, Linkedin no es distinto en este sentido. La diferencia es que Linkedin está más enfocada al mundo empresarial y laboral, por lo que es mejor centrarse en conectar con aquellos perfiles que estén más relacionados con nuestra actividad. No es obligatorio que el cien por cien de tus contactos sean de actividades parecidas o relacionadas, también puedes tener de otros sectores con los que hayas tenido relación alguna e incluso conectar con clientes.
Pero a la hora de posicionarnos como expertos, siempre será ideal rodearnos de aquellos con los que podamos interactuar, generar debate e incluso entablar relaciones comerciales y laborales. Siempre intentar conectar con gente que nos sea de interés o que podamos ser la solución a sus problemas. Para ello deberemos personalizar un mensaje y presentarnos a cada persona de forma amable y que le invite a conectar con nosotros, explicarle la razón por qué queremos tenerle en nuestra red de contactos.
Además, el hecho de tener una mayor red de contactos nos dará fiabilidad, importancia y, cuando generemos contenido de valor, nos proporcionará un mayor alcance.
Otra parte esencial de los contactos está en las recomendaciones. Conseguir que alguien te recomiende supone una gran diferencia a ojos de los usuarios o gente interesada en tu perfil. El hecho de que alguien ajeno a ti describa tu profesionalidad y comparta los resultados que ha obtenido colaborando contigo, supone un refuerzo de tu actividad profesional, das a entender que lo que haces, lo haces muy bien. Antiguamente las recomendaciones se hacían con el boca a boca, pero ahora el mundo tecnológico facilita mucho la difusión de estas, lo que deja patente la relevancia de las redes sociales en la marca personal.
Por eso es muy importante conseguir tanto recomendaciones como que te validen las habilidades del perfil, para así conseguir una mejor imagen de marca personal.
¿Y cómo funcionan los grupos profesionales en LinkedIn?
Los grupos son comunidades de profesionales de un mismo sector, donde se crean debates, se realiza networking y mucho más. Su importancia es vital a la hora de conseguir contactos. En estos grupos se comparte contenido de valor y también se generan ideas.
Linkedin te da la posibilidad de buscarlos o incluso crearlos. Existen multitud de grupos, pero la plataforma solo te deja estar presente en 50 grupos de forma simultánea. Así que selecciona bien los grupos dónde quieres estar y que puedan aportar ventajas a tu marca personal.
El contenido como el rey de la marca personal
Vale, todos sabemos que tener el perfil de Linkedin bien estructurado queda genial y es muy útil, pero realmente ¿qué nos puede diferenciar del resto? Nuestros conocimientos.
No hay nada mejor que demostrar tus conocimientos generando contenido de valor. Lo que más valoran los usuarios a la hora de buscar expertos, es gente que crea contenido útil, relevante y valioso. El hecho de demostrar tus conocimientos genera una mayor confianza y otorga una mayor autoridad al creador del contenido. El contenido es el rey.
Si el contenido que generas es bueno y es capaz de compartirse o viralizarse, automáticamente estarás aumentando el valor de tu marca personal, lo cual puede aportarte muchas ventajas. Tu credibilidad, el interés por tus contenidos, y el seguimiento de tu perfil se disparará. Habrás conseguido el objetivo de posicionar tu marca personal.
Pero como todo, la marca personal debe desarrollarse de forma holística. Si cumplimentamos el perfil de forma optimizada, pero no somos capaces de generar contenido de valor, difícilmente conseguiremos resultados. El conjunto de todas las acciones va a ser lo que nos lleve a completar los objetivos.
Un último consejo: participa en la comunidad, ¡sé activo!
Finalmente interacciona con tus contactos, comenta, recomienda, comparte. Generar debates y responder opiniones te van a permitir ser más visible. Al fin y al cabo, estamos en una red social, por lo tanto, sé social y aprovecha todas las oportunidades que te brinda la plataforma.