Nadie quiere vivir una crisis, especialmente las startups. Como emprendedor, te enfrentas cada día a un montón de incertidumbres y retos para hacer crecer tu empresa. Cuando añades una crisis a la mezcla puede parecer que todo a tu alrededor está definitivamente poniéndote contra las cuerdas. Pero las crisis también pueden resultar positivas y ayudarte a identificar y aprovechar nuevas oportunidades. Para ayudarte a superar cualquier crisis hemos reunido algunos de los mejores consejos para emprender en tiempos de crisis, sobrevivir en tiempo difíciles como emprendedor y prosperar.
Pasos prácticos para emprendedores en época de crisis
Lo complicado muchas veces no es conseguir financiación para crear una empresa, sino mantenerla y poder seguir cuando llegan tiempos peores. Llegados el caso, es habitual preguntarse cómo emprender en tiempos de crisis, qué necesitas y en qué aspectos es importante focalizar para sacar adelante la empresa y buenos resultados.
En este sentido, la parte positiva de emprender en tiempos de crisis es que se agudiza el ingenio y la creatividad exponencialmente.
1. Replantéate el business plan
Cuando la economía se para y todo el mundo, incluyendo las empresas, tratan de adaptarse a una situación nueva e inesperada, hay que cuestionar los planes más básicos que quizás dábamos por hechos cuando comenzamos.
Un Business plan puede no tener ningún problema durante muchos años, pero en tiempos de crisis, toda la planificación previa puede verse truncada de inmediato. Como esto no es algo que podamos que se pueda planificar, deberemos se ágiles y tener la mente abierta para buscar nuevas soluciones y formas de actuar.
2. Busca las oportunidades
Aunque la crisis puede causar muchos daños a las empresas y a la economía en general, también crea muchas oportunidades, ya que las necesidades y las prioridades de los consumidores y la sociedad cambian. A veces, estos cambios son enormes y muchos hábitos y costumbres de una gran parte de la sociedad cambian de la noche a la mañana.
Innovar en un sector tradicional, darle la vuelta a tu producto o servicio… En estas transformaciones, tanto el consumo como la inversión se reorientan hacia nuevas necesidades y es ahí donde tenemos que centrarnos para buscar nuevas fórmulas de satisfacer a nuestros clientes.
3. Aprovecha tus fortalezas
Las crisis son el momento perfecto para hacer que tus puntos fuertes brillen. Algunos puntos fuertes son exclusivos de tu producto o servicio, y otros son exclusivos de ti y de las personas que forman parte de tu empresa. Analízate a ti mismo y a tu empresa para descubrir qué es lo que mejor haces.
Luego, trata de llevarlo al siguiente nivel. Todas las startups tienen la ventaja de ser pequeñas, esto a menudo las hace mucho más flexibles que una gran empresa para adaptarse, cambiar de enfoque o incluso rehacer completamente su oferta durante tiempos de máxima incertidumbre.
Además, las startups suelen sentirse más cómodas con las nuevas tecnologías, y eso puede ser una gran ventaja, como cuando se emprende en tiempo de pandemia y con la crisis del COVID-19, en la que el lugar de trabajo se ha vuelto digital.
4. Dirige todos los recursos a lo importante
Si pensabas que estar centrado en lo esencial de una startup era importante, durante una crisis quizás sea lo más esencial de todo. Durante una crisis, el volumen de trabajo, incertidumbre y miedo se dispara. Es probable que tengas que enfrentarte a temas desde los presupuestos, los suministros, el marketing y la financiación todas al mismo tiempo y en un margen ínfimo.
Para centrarte en lo verdaderamente relevante, piensa en lo que tú y tu empresa podéis hacer mejor que la mayoría. Cuando encuentres los pilares básicos sobre los que se asienta tu proyecto, invierte en ellos todos los recursos posibles.
Aumenta también tus esfuerzos de ventas y marketing, esto te permitirá captar la demandas de los consumidores cuando muchos de tus competidores necesitan reducir sus costes de publicidad.
5. Acepta la incertidumbre
Puede que quieras respuestas inmediatamente, pero es poco probable que las vayas a encontrar durante una crisis. En estos momentos es vital aceptar la incertidumbre porque nadie tiene una bola de cristal. Es útil saber que una crisis no puede durar siempre, en algún momento llegará a su fin, y hay que estar preparado.
Lo mejor que podemos hacer en un momento de máxima incertidumbre económica como durante una profunda crisis es tratar de aceptar cuanto antes el nuevo tablero de juego, y jugar con las mejores cartas que tengamos.
Tratando de no preocuparnos por aquellas cosas que están fuera de nuestro alcance y poniendo toda nuestra energía en los ámbitos en los que si podemos hacer una diferencia tendremos una gran parte de la batalla ganada, para no sólo sobrevivir, sino prosperar durante una crisis.