Todos los colectivos tienen en su seno una serie de normas (formales o informales, escritas o tácitas) a las que se atienen y a través del cumplimiento de las cuales se ejecutan todos los procedimientos de la empresa. La ausencia de estas normas, también llamadas políticas de empresa, conduciría a una desorganización total en el conjunto del engranaje empresarial. Redactar mal las políticas puede conllevar pérdidas de energía, tiempo, e incluso, malestar entre la plantilla. Por lo que diseñar políticas de una empresa es siempre un cometido crucial para la productividad, la convivencia y el devenir de la compañía, y que deben ser aplicadas desde el primer día.
¿Cómo hacer las políticas empresariales?
Establecer unas políticas empresariales no es, en ningún caso, una tarea ardua y que deba dilatarse en el tiempo, sino que basta con que la gerencia de la empresa, encargada de su redacción y cumplimiento, tenga claros cuales son los comportamientos, los métodos de trabajo, el ambiente laboral o la productividad de la misma que desean, es decir, que sepan de forma clara los principios por los que se va a regir la empresa y en los que se asientan su filosofía de trabajo.
Así, para funcionar adecuadamente, toda empresa debe siempre diseñar unas políticas propias que sean:
- Objetivas y justas. Deben responder a criterios de igualdad y objetividad, y no a antojos y arbitrariedades de la gerencia que no tengan ninguna clase de fundamento sólido.
- Una norma o política de empresa nunca puede contradecirse a sí misma o al resto de tipos políticas. Se trata de crear un conjunto de reglas compacto, acorde y lógico.
- Un empleado nunca podrá cumplir una política si la desconoce. Es imprescindible que todo el personal de la empresa tenga conocimiento de las bases y principios que guían el rumbo de la empresa.
- Útiles y vinculadas a propósitos laborales. Todas y cada una de las políticas deben ser concebidas para la realización y culminación de los objetivos planteados por la empresa. Pensadas a partir de principios de productividad empresarial, compromiso y utilidad. No deben suponer trabas ni entorpecer las labores o las gestiones.
Pasos para crear la políticas de empresa
Una vez sabemos que las políticas de empresa deben sustentarse en estas bases, uno se pregunta: ¿Cómo hago unas políticas de empresa? ¿Cuáles son los pasos necesarios para crear unas buenas políticas?
¡Veámoslos! Estos son los pasos para realizar las políticas de una empresa:
- Paso 1: Proyectar y desarrollar las políticas, en las cuales se atiende a la necesidad, la utilidad y su redacción.
- Paso 2: Aprobación de las políticas. Se revisan y se realizan las adaptaciones necesarias, para que una vez acordadas y redactadas en su versión definitiva puedan ser aprobadas por la dirección de la empresa.
- Paso 3: Difundir las políticas de la empresa. Consiste en hacer saber las mismas a todo el personal o persona vinculada a la actividad laboral de la compañía, y formalizar su aplicación.
- Paso 4: Mantener la aplicación, el cumplimiento y la vigencia de las políticas. Es aconsejable hacer actualizaciones, en caso de ser necesarias, al final de cada ejercicio.
Igualmente son aconsejables los siguientes dos aspectos a la hora de crear unas políticas:
- No pueden existir ambigüedades en su redacción. El empleo de un lenguaje claro y preciso es fundamental para impedir las confusiones.
- Flexible y adaptable en el tiempo. Esto forma parte de las tareas de mantenimiento y es básico saber adaptarse a los tiempos y a las circunstancias de cualquier tipo. Una empresa no puede ignorar lo que ocurre a su alrededor y debe ser moldeable.