¿Te acuerdas de las “chuletas” que tus compañeros de clase -o tú mismo- elaboraban para copiar los conceptos más importantes de la lección en un examen? O, siendo un poco más profesionales: ¿Te vienen a la cabeza esas tarjetas con esquemas o palabras clave que preparas para retener la información más relevante justo antes de una exposición? Pues la razón de ser de estas chuletas y tarjetas es la misma que la de las Job-Aids: las píldoras formativas que reducen la cantidad de información que el empleado debe retener para efectuar sus tareas de la manera más efectiva posible. Sabemos que a veces es imposible quedarnos con todos los detalles -especialmente si son procesos formativos que se actualizan cada dos por tres- así que… ¿Por qué no condensar la los datos indispensables en una “píldora” que nos ayude a retener mejor la información?
¿Qué son las Job-Aids o píldoras formativas?
Evidentemente, las Job-Aids no son píldoras en el sentido literal de la palabra, pero sí un tipo de contenido e-learning (es decir, de formación online) práctico y de corta duración que está diseñado para profundizar en una disciplina concreta. ¿El objetivo? Que los estudiantes -en este caso los empleados de tu empresa- puedan adquirir los conocimientos necesarios para manejar dicha disciplina. Pero ojo: los Job-Aids complementan a los programas de formación tradicionales, pero en ningún caso los sustituyen del todo. Las píldoras formativas son una suerte de punto de referencia para que los empleados puedan utilizar los conocimentos aprendidos en su puesto de trabajo.