En la contabilidad llamamos asiento contable al conjunto de registros o apuntes contables que hacemos en el libro de contabilidad, con el objetivo de dejar constancia de un hecho económico que hará que se produzca una variación cuantitativa o cualitativa del patrimonio de la empresa, y, por consiguiente, un movimiento en las cuentas. En resumen, una anotación con la finalidad de dejar constancia de un hecho o una operación contable.
Tipos de asientos contables
Como ya hemos mencionado, en contabilidad, los asientos contables son la herramienta básica con la que anotaremos correctamente los movimientos en la actividad de la empresa. El principio de la contabilidad de una empresa es la partida doble. De forma que en cada asiento contable intervienen dos cuentas de mayor. Una irá al Debe y la otra al Haber. Así, podremos ver que hay una igualdad entre los ingresos y lo que gastamos.
Pero tenemos que hacer constar que existen diferentes tipos de asientos contables. Por lo tanto y si queremos tener nuestras cuentas en orden, deberemos de conocer dichos asientos para no soportar inconvenientes cuando llegue la hora de presentar las liquidaciones de impuestos o por si a Hacienda nos hace una inspección.
Ya, de hecho, todos los registros en el libro de contabilidad, los podremos llamar asientos contables, aunque vamos a diferenciar dos grupos diferentes:
- Asientos según el fondo: recogen la situación financiera de una sociedad en un ejercicio fiscal.
- Asientos según la forma: identifican el número de cuentas que intervienen en un trato.
Cada uno de estos asientos se dividen a su vez en otros y que explicamos a continuación:
Asiento contables según su fondo
Pueden ser hasta de cuatro tipos. Aunque cumplen, en realidad, dos funciones básicas. La primera la de dejar registro de la actividad diaria y arreglar los errores que detectemos. La segunda afecta o pertenece al cierre de cuentas cuando finalizamos el ejercicio fiscal.
- Asientos operativos: los que recogen las operaciones que se llevan a cabo en la empresa durante el período de un año de ejercicio fiscal, ordenados cronológicamente.
- Asiento de ajuste: son las anotaciones que se realizan cada final de ejercicio, para que la contabilidad nos diga la verdadera situación económica y patrimonial de la empresa.
- Asiento de regularización: los registros con los que saldamos cuentas y el saldo resultante lo trasladamos a gastos e ingresos en el libro de resultados del ejercicio.
- Asiento de cierre: son parecidos a los de regularización, aunque en este caso se cierran todas las cuentas que tienen saldo para finalizar la contabilidad de ese año.
Asientos contables según su forma
Ahora veremos los asientos contables según su forma:
- Asientos simples: los que registran el movimiento en dos cuentas. Una de ellas será la de cargo y la otra el abono. Son con los que habitualmente realizaremos los comprobantes de diario.
- Asientos compuestos: estos son como los anteriores. Pero a diferencia de estos, implican a tres o más cuentas para ser considerados compuestos. Obligatoriamente deben de registrar más de dos cuentas de cargo o abono y no tienen límite alguno.
Comprender estos asientos contables puede parecer al pronto, algo sumamente complejo si no estamos acostumbrados a usar la contabilidad. Aunque actualmente los programas que usamos, nos simplifican en gran medida todo este laborioso trabajo.
¿Cómo se hacen los asientos contables?
Es bien fácil. Debemos de tener en cuenta el principio de doble partida. Es una técnica que utilizamos para reflejar todas las operaciones de la empresa en un tiempo determinado. De esta forma y como hemos dicho anteriormente, vemos cómo dos cuentas, como mínimo, aparecerán en nuestro asiento contable. Una irá al Debe (que será el cargo) y la otra al Haber (esta será la del abono).
El debe irá a la izquierda y el haber a la derecha, no nos compliquemos más, así de fácil como esto:
- Si es un cargo anotamos al debe (a la parte izquierda)
- Si es un abono anotaremos en el haber (la parte derecha)
Siempre y cuando tanto el importe de la izquierda (debe) y el importe de la derecha (haber) sumen lo mismo, de esta forma tan simple dejaremos el asiento contable cuadrado.
¿Cómo llevar la contabilidad de la empresa?