La gestión del talento y los recursos humanos de una empresa no son términos opuestos, sino que se complementan y enlazan. Aunque las características definitorias de cada una son notorias. Ya llevamos tiempo oyendo hablar de los recursos humanos en una empresa y de su gestión. Sin embargo, la gestión del talento es más reciente y aunque parecen términos intercambiables no lo son, pues los enfoques de cada uno son distintos.
En la gestión del talento se le da más importancia al individuo, a sus capacidades y a su potencial. A continuación estudiaremos las principales diferencias gestión del talento y recursos humanos, después ya te toca a ti decidir que modelo quieres instaurar en tu empresa.
Gestión del talento vs recursos humanos de una empresa
La gestión de recursos humanos en una empresa se encuadra en el ámbito de lo operacional. Es decir, a administrar los recursos, la plantilla de la empresa u organización. La gestión del talento plantea un nuevo enfoque en cuanto a contratación, capacitación y retención de los perfiles más valiosos que conforman nuestra empresa.
Ahora nos centraremos en cuáles son estas diferencias que los distinguen y que, a su vez, los entrelazan.
1. La flexibilidad
La flexibilidad es un término que se aplica a muchos de los patrones que la gestión de los recursos humanos ha establecido. A deferencia de estos, la gestión del talento intenta evitar el encasillamiento que la gestión de recursos humanos de las empresas han impuesto.
La gestión del talento evita hablar de puestos de trabajo y resultados. Sino que se centra en las capacidades y competencias organizativas. De este modo se analiza si ya se posee en plantilla lo que andamos buscando. Personas que no son solamente buenas en el rol que están ejerciendo y que por tanto, tienen un buen potencial para realizar otro tipo de tareas. Todo ello, en pro de la organización o empresa.
Esta flexibilidad es un incentivo también para los propios empleados. Dado que, la posibilidad de prosperar y mejorar dentro de la empresa por otras aptitudes. Aquellas que puede que en un primer momento no se contemplen, pero que les motivan a mejorar en muchos sentidos y que nos ayuda a atraer al talento humano a la empresa.
2. La visión global
La visión global hace referencia a la segmentación y el cambio que supone el cambio de una visión tradicional de la empresa y de los recursos humanos. A una holística, en ala que se tiene en cuenta la optimización del reclutamiento, el aumento de la efectividad de los programas de captación y el éxito de cómo retener el talento, es decir, a los mejores.
3. La descentralización
Las tareas anteriormente centralizadas en el departamento de recursos humanos en una empresa se empiezan a repartir entre los distintos departamentos. Esto es posible gracias al mayor grado de autonomía y de compromiso con la organización que la gestión de talentos supone.
En este proceso son los propios empleados quien se hacen responsables de acoger las nuevas labores y actividades. Esto es fruto del interés personal que tienen por lograr mejores resultados.
4. Carácter estratégico
Por último el carácter estratégico de cada uno de los conceptos. Organizar los salarios, los seguros, las vacaciones, las altas y bajas de las Seguridad Social, los finiquitos, contratos y todas las labores que se enmarcan en las funciones de los recursos humanos y que son necesarias no desaparecen. Sino que, como la función de la gestión de talento es estratégica, permite que parte del departamento de recursos humanos se centre en la gestión diaria de las personas.
De este modo, los responsables del talento pueden dedicarse a definir los planes a largo plazo para el resto y por el bien de la compañía acorde con los objetivos empresariales.
Este cambio en la visión surge por la necesidad de adaptarse a un mercado competitivo. En el que tener a los mejores significa éxito. La clave está en cómo gestionar el talento humano que ya tenemos y conseguir captar a los que podemos tener. Ahora que ya sabes que gestión del talento y recursos humanos no es lo mismo, te toca a ti decidir cuál es la estrategia que quieres seguir en tu empresa.