Se suele decir que si no estás en Internet, tu empresa no existe pero quizá sería mejor decir que si no tienes un buen hosting, tu empresa será prácticamente invisible. La transformación digital es necesaria, y para ello es necesario contar con las mejores herramientas. Sin un buen alojamiento para tu web, difícilmente aparecerá entre las primeras opciones en las búsquedas en Google, de modo que pasará desapercibida.
Pero no solo eso, el hosting también hace que la página cargue rápido, factor clave en la experiencia del usuario. Por eso, antes de elegir alojamiento para la web de la empresa hay que analizar y valorar una serie de factores determinantes en el éxito o fracaso de la elección.
Factores determinantes a la hora de elegir el hosting
1 . Soporte técnico
Muchas veces despreciado, el soporte técnico es una parte fundamental para acertar con la decisión. Quizá tú entiendas de vacaciones o fin de semana, pero la web y los internautas no y si la web cae el sábado a mediodía no podemos esperar al lunes para recuperarla, hay que hacerlo inmediatamente.
Por eso, buscaremos un servicio técnico 24 horas, 365 días del año, que está disponible en español. El chat online o el teléfono de atención al cliente pueden estar bien, pero el sistema de tickets siempre es mejor. Prueba el servicio técnico durante la garantía para ver cómo funciona. Siempre es bueno comparar las distintas compañías, su servicio técnico y buscar opiniones sobre la satisfacción del cliente.
2. El espacio disponible
Otra de las claves en la elección de un buen hosting, en especial si es compartido -la opción más común- es saber cuánto espacio tendremos y si se ajusta al tamaño del proyecto y al tráfico que esperamos. Si tienes previsto el crecimiento de la empresa, siempre puedes optar por un hosting ampliable que te permita agregar espacio en el futuro, aunque debes conocer la tarifa de ampliación.
Aún así, hay que ser realistas en la elección, huyendo de ofertas de espacio ilimitado. Los discos duros SSD son más caros, pero su velocidad y prestaciones compensan el precio.
3. La velocidad de carga de la web
Ya hemos dicho que la experiencia del usuario depende, en parte, de lo rápido que cargue la web, y eso es cosa del hosting. Cuanto más lenta carga la página, mayor es la tasa de abandono del usuario, así que buscaremos un hosting que utilice servidores potentes y que no lo sobrecargue con un exceso de clientes, aunque difícilmente nos informarán de ello.
El tamaño de la web también influye en la velocidad de carga, así que además de usar un buen hosting asegúrate de optimizar las imágenes y ficheros de la web para evitar páginas muy pesadas.
4. Correo, dominios y subdominios
De nuevo, el tamaño del proyecto empresarial es decisivo en este aspecto. El número de cuentas de correo corporativo que ofrece depende del hosting, así que tendremos en cuenta las expectativas de futuro en este sentido. También los dominios y subdominios, por ejemplo si vas a lanzar una web asociada a la principal -por ejemplo, la tienda online de la web principal-.
Muchos planes de hosting están limitados a un solo dominio, así que necesitarás un segundo plan para un nuevo dominio; pero los buenos proveedores te permitirán crear varias webs y dominios dentro de tu espacio disponible. En artículo te enseñamos a cómo comprar un dominio web.
5. La seguridad
Obviamente, la seguridad es otra cuestión esencial al elegir hosting. Hay muchos elementos a tener en cuenta en este sentido, pero si nos limitamos al hosting hay tres aspectos cruciales:
- las medidas anti-hackeo, firewalls del hosting que detectan a terceros intentando acceder a tu cuenta;
- la protección contra ataques DDoS, intentos de tumbar la web cuando ganas algo de visibilidad, y
- las copias de seguridad automáticas, algo que un buen servicio de hosting hará con una frecuencia de al menos una copia al día para minimizar los efectos de cualquier problema en la web.