Si tu empresa no cuenta con una escala salarial definida, es posible que te encuentras con la siempre incómoda situación de que un trabajador te pida un aumento. Es algo incómodo tanto para él, que se arriesga a fracasar, como para ti, que deberás lidiar con la situación y buscar la mejor salida para las dos partes. A continuación, vamos a descubrir cómo afrontar la petición de aumento de sueldo de tus trabajadores, pero como es habitual la clave está en que te mantengas firme, seas reflexivo y trates a todos los empleados por igual.
Tómate en serio todas las peticiones
El respeto es clave en cualquier relación laboral, y el trabajador ya ha dado una muestra de coraje al pedirte ese aumento. Por eso, no intentes evitar la cuestión y tómate en serio la petición. Nunca está de más tomarse un día para reflexionar sobre el tema y ver cómo lo puedes abordar desde la mejor perspectiva. Precipitarse es un error, así que intenta averiguar qué razones tiene ese empleado para solicitar el aumento (sueldo bajo, éxitos y logros, muchas horas de trabajo, viajes, trabajo en festivos…) y si de verdad se lo merece.
Convócalo a una reunión, donde le puedes hacer la pregunta del millón: “Si tú fueses el jefe, ¿te subirías el sueldo?”. Es una buena forma de comprobar los argumentos del trabajador para defender su postura o, por el contrario, destapar las cartas por si va de farol. También hay que valorar si la petición está relacionada con una oferta de la competencia. ¿Le ofrecen más dinero? Investiga los sueldos que se pagan en el sector y compáralos con los tuyos para ver si están a la altura o pagas por debajo de la media.
¿La empresa puede permitirse el aumento salarial?
Lo lógico sería que la empresa cuente con un presupuesto para salarios, así que del mismo modo que le preguntaremos al trabajador si él se concedería la subida de sueldo vistos sus resultados, nos tenemos que preguntar cómo afectaría ese aumento salarial a nuestra compañía…y cómo nos puede afectar la posible pérdida de ese trabajador. Lógicamente, la subida salarial afectará al presupuesto salarial de la compañía, pero a largo plazo la pérdida de ese empleado puede reducir los ingresos de la empresa, afectando a la economía de la compañía.
El factor motivacional
También deberías tener en cuenta que tu respuesta afectará directamente a la motivación tanto del propio trabajador que te ha pedido un aumento como de los empleados que lo rodean. Si aceptas la petición de un mayor salario, el trabajador estará más motivado. Aumentará su apego por la empresa y se esforzará más en el día a día. Pero no solo mejorará el rendimiento de este empleado, puede ser un estimulante más para el resto de trabajadores, que aumenten su productividad para tener argumentos de cara a una petición similar.
En cambio, si rechazas el aumento de sueldo el trabajador se puede desmotivar. Y del mismo modo que él se desmotiva, lo harán el resto de compañeros que verán como el esfuerzo que han hecho no ha sido compensado, y no se sentirán valorados. Se limitarán a cumplir con su horario y buscarán un empleo con una mayor compensación económica. Por eso, sí vas a rechazar la propuesta de aumento salarial deberás hacerlo con delicadeza y con propuestas de futuro asociadas al rendimiento que te comprometas a cumplir.
Una solución a medio camino entre la aceptación de la petición y el rechazo está la mejora de las condiciones laborales del trabajador: un horario más flexible, más días libres, menos horas de trabajo con el mismo sueldo, la posibilidad de trabajar un día desde su casa, más visibilidad ante los clientes más destacados, más o menos viajes de negocios -según el caso-… Son formas de reconocer el buen trabajo del empleado, y el trabajador reconocerá tu esfuerzo.
