Crear una startup puede ser una solución para hacer realidad el modelo de negocio que tienes en mente; emprender es una tarea complicada pero muy gratificante cuando obtienes resultados. La creación de una empresa y los trámites a seguir en tu proyecto empresarial marcarán el desarrollo y la viabilidad del negocio que has pensado.
Pasos que debes seguir para crear tu propia startup
Si ya cuentas con una idea de negocio, antes de hacerla realidad hay que barajar una serie de cuestiones para analizar su viabilidad. Convertir esa idea en realidad es posible gracias a la planificación y a la definición del modelo de negocio con una serie de garantías que lo conviertan en viable. Esto dará a tu startup la consistencia empresarial necesaria para obtener el éxito empresarial.
Define el modelo de negocio
Define la idea que vas a desarrollar, el nicho de mercado, la necesidad de marketing y publicidad, suscripción y afiliación, y establece aquello que te va a hacer diferente. Aquello que va a marcar la línea de tu producto y lo que vas a vender.
Si ya tienes un prototipo, conocerás los gastos que supone su creación, habrás de tener realizado un plan de viabilidad que te permita saber los beneficios y los gastos que generará tu idea.
En esta parte del proceso, tendrás que hacerte preguntas como: ¿facilitará las cosas a mis clientes potenciales?, ¿acortará su tiempo de búsqueda?, ¿resulta emocionante y funcional?
Crea, por tanto, una definición clara y poderosa de tu modelo de negocio. Defínelo con fuerza y con palabras contundentes. Si ya tienes esto, es fácil que tu startup esté pronto en el mercado, ya que los trámites siguientes serán mucho más rápidos. El marketing es importante y las palabras que le den el poder que necesitas para venderlo definirán tu negocio. Una vez que hayas hecho esto, rodéate de mentores que te ayuden a revisar los fallos y a mejorar la idea que has creado.
Busca financiación
Aunque en España la mayoría de la financiación viene de los bancos, no es fácil obtenerla para nuevos modelos de negocio sin avales, y resulta complicado hacerlo en plazos tan cortos de tiempo. Las familias, los amigos y los denominados business angels son los que finalmente acaban facilitando el capital necesario para poder poner en marcha el negocio.
El planteamiento de tu idea ante un business angel ha de ser creíble y has de tener programado el coste y la necesidad de inversión para su crecimiento, así como desarrollar un modelo de negocio que resulte atractivo para la inversión ajena.
Revisa también en ayuntamientos, diputaciones y Gobierno de tu comunidad las ayudas para el emprendimiento y la creación de startups. En algunas localidades se potencia mucho la inversión, y las subvenciones que se ofrecen pueden ayudarte a definir la viabilidad del negocio y sus posibilidades de crecimiento.
Forma un buen equipo
Busca profesionales con los que te sientas a gusto, que cubran tus necesidades con funciones bien definidas. La especialización en el sector te permitirá acceder a los mejores para las actividades que tengas que afrontar.
La creación del modelo en Internet y su lanzamiento al mercado es muy rápida si cuentas con las herramientas y conoces la forma de realizar una web, de posicionarla bien. Si no es así, busca un buen profesional en este aspecto. Conociendo los mecanismos para el posicionamiento, te harás mucho más visible en las redes sociales y en Internet. Esto te permitirá salir al mercado con toda la artillería posible y que tu producto se haga visible en el plazo más corto de tiempo posible. Directamente puedes conseguir atraer más financiación para que el modelo inicial crezca de forma progresiva en poco tiempo.