Del garaje de casa a pelear frente a frente con los líderes. Gymshark es una marca que ha logrado crear rápidamente un nombre propio que representa a una gran comunidad, generando márgenes de ganancia más que alentadores. Pero, ¿Quién fue el soñador del garaje?
Te presentamos la biografía completa de Ben Francis, un amante del gimnasio que ha sido capaz de crear una empresa valuada en 1.500 millones y que ha sido pionero en el marketing de influencers.
¿Quién es Ben Francis?
Benjamín David Francis, nació en 1992 en West Midlands, una de las nueve regiones oficiales de Inglaterra, pero se formó fuera de su ciudad natal. Creció en Bromsgrove, ciudad donde se educó y conoció lo que luego sería un pilar en su carrera profesional: la informática.
Ya de niño, Francis, solía soñar con su futuro, orientando su vida hacia una carrera profesional como jugador de fútbol, pero, con el tiempo y la novedad, sus intereses fueron migrando, lentamente, hasta llegar a lo que lo trajo hasta aquí.
Con 17 años cumplidos, el joven empresario, comenzó a frecuentar el gimnasio, lo cual, es lo que ha abierto su mente y cambiado su enfoque totalmente. Francis la considera a esta, una etapa clave en su carrera, por lo que más tarde dijo: “me di cuenta de que la estructura, la coherencia y la ética de trabajo que encontré en el gimnasio podrían aplicarse a diferentes áreas de mi vida y funcionaria”.
El gimnasio no fue lo único que logró cautivar la mente de Francis en esa etapa, sino que fue el puntapié inicial de su éxito. Junto con el gimnasio, conoció el culturismo y la posibilidad de poder relacionar, esta pasión, con la informática, que no dejaba de ocupar gran parte de su cabeza, hacía ya varios años.
De esta forma, comenzó a pasar horas y horas frente a su ordenador viendo videos sobre fitness y teniendo sus primeras interacciones con su público, para los cuales, creaba aplicaciones sencillas, con el afán de ayudar a otros en la creación y utilización de calendarios de entrenamiento y a practicar ejercicios deportivos.
Carrera
Con 19 años y mientras asistía a clases en la universidad, Francis, trabajaba como repartidor de pizzas en sus tiempos libres. Los horarios incómodos, el salario que no le gustaba y el hambre por incurrir en un negocio relacionado con sus amores, lo lleva a formar una asociación con su amigo, Lewis Morgan.
Ya con su nuevo socio y colega, el emprendedor, se lanzó a vender suplementos, que adquirían al por mayor y luego comercializaban en una página web, la cual habían llamado Gymshark.
A partir de aquí, Francis tenía dos cosas claras: que el negocio de los suplementos era sumamente difícil y que ya no conseguía prendas de ropa que le permitieran ver los resultados del entrenamiento. Así que Morgan y él, decidieron dar un vuelco a su negocio y gastar sus pocas ganancias, en la que sería su próxima gran apuesta por el éxito. Decidieron comprar una máquina de cocer y una impresora serigráfica. En poco tiempo, la casa de Francis, se había transformado en un taller de ropa deportiva.
Llegado el 2013, decide dejar a un lado sus estudios en c, en Aston, para poder enfocarse al 100% en su nuevo proyecto, de cualquier manera, Francis, mantiene que, esos años de estudios, fueron suficientes para aportarle “una base sólida sobre la cual construir un negocio”. Esta decisión se vio impulsada por los resultados que obtuvo Gymshark, en la feria de fitness BodyPower, en Birmingham, donde se exhibieron productos de la marca.
Una vez terminada la feria, un chándal de marca de Francis y Lewis generó 30 mil libras en ventas, en tal solo 30 minutos, luego de haberse viralizado en Facebook. Es en ese momento, cuando se da cuenta de que su etapa de repartidor y universitario, había llegado a su fin.
Gymshark comenzó a tener presencia en redes y en el mundo deportivo, de la mano de personas influyentes en el sector, quienes recibían prendas gratuitas para mostrarse con ellas. Lo cual, fue una campaña que llevo a la marca a disparar sus cifras de ventas, hacia los 45 mil dólares diarios. De esta manera, Gymshark, fue una de las marcas pioneras en la utilización de personas influyentes en redes sociales, para la atracción y captación de nuevos públicos.
Dos años después, dejó el cargo de director ejecutivo de la empresa y se convirtió en el nuevo director de marketing, producto y marca, medida que, según él, le permitiría crecer más rápidamente a la empresa y le daría lugar a poder trabajar sus habilidades como empresario, buscando convertirse en el empresario completo que Gymshark necesitaba.
En 2018, Gymshark, abre su nueva sede en Solihull, y comienza un nuevo proyecto, llamado “We Lift This City”. Este se basaba en organizar popups, en distintas ciudades de distintas partes del mundo, donde era posible adquirir prendas exclusivas. Esta fue otra de las razones que llevaron a Francis, a formar parte de la lista de los 30 millonarios menores a 30, de Forbes, lo cual también hizo que las ventas se disparasen.
A partir de ese momento y con la apertura de un gimnasio de marca propia y centro de innovación, en 2019. La marca no ha parado de crecer, con una media de crecimiento del 62% anual, desde 2018, llevándola a superar los 200 millones de dólares en ingresos y los 18 millones de beneficios netos.
Estos números y repercusión, no iban a pasar desapercibidos. Despertó el interés de General Atlantic (empresa líder global de capital de crecimiento, que busca aportar de manera económica y estratégica, en el crecimiento de otras empresas), quienes compraron una participación del 21%, en un acuerdo que valoro a la empresa en 1.500 millones de libras esterlinas. En agosto del 2021, decide volver a ocupar el puesto de director ejecutivo.
Hoy en día, la empresa, se encuentra abriéndose hueco para pelear con los gigantes del mercado, como lo son Nike o Lululemon. Más allá de que los números de estas empresas son lejanos para Gymshark, su ejército de fans e influencers, no dejan de generarle renombre y popularidad a la marca, llevándola a abrir una tienda en Londres, más específicamente, en la misma zona donde se encuentran aquellos a quienes buscan alcanzar. La estrategia de marca es clara y saben a dónde quieren ir y cómo hacerlo. Por el camino correcto, el panorama de la empresa, puede ser más que alentador.
Patrimonio neto
Ben Francis, cuenta con el 70% de Gymshark que, como dijimos anteriormente, se encuentra valuada en 1.500 millones de libras esterlinas, por lo que el patrimonio del empresario es de 1.300 millones de dólares, teniendo a Gymshark, como la fuente principal de su riqueza.