Cuando un emprendedor inicia una actividad comercial creando una empresa son muchas las cuestiones que tiene que tener en cuenta en relación a la constitución de empresa, desde temas de viabilidad financiera a estudios de mercado o cuestiones legales de diferente naturaleza. Son tantos los factores a tener en cuenta a la hora de emprender, que muchos se termina por mezclar conceptos y cayendo en una confusión fácilmente subsanable. Y una de las confusiones que más se repiten entre los emprendedores es la de la diferencia entre marca, nombre comercial y razón social.
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¿Qué es la razón social?
Si quieres saber que significa razón social, atención, porque aquí lo explicamos. La razón social identifica a una persona jurídica, es la firma legal, que permite a una empresa pagar tributos, emitir facturas y atender a asuntos legales. Es por ello que el trámite de registro de razón social es obligatorio.
Esto es, es la que identifica a la empresa en las cuestiones legales. La razón social o denominación es sujeto de obligaciones o derechos. El nombre de la razón social sería como el nombre que aparece en el DNI de una persona física y el número del documento de una persona física sería el número de CIF, la identificación fiscal de una persona jurídica.
¿Qué es una marca?
Para saber qué es una marca tienes que tener en consideración que esta actúa como distintivo de la empresa y permiten que se distingan en el mercado los productos o servicios de una determinada empresa. Por eso una empresa con una determinada razón social puede tener registradas varias marcas.
El uso exclusivo de la marca pertenece a quien la haya registrado, tanto en el caso del nombre comercial, como el de los signos que representen y distingan a la empresa y sus productos.
Vistas las diferencias entre razón social y marca, el siguiente paso es ver las diferencias entre razón social y nombre comercial.
¿Qué es el nombre comercial?
El nombre comercial de una empresa es independiente del nombre que la sociedad ha escogido para inscribirse como razón social y su finalidad es que se distinga a la empresa en el mercado. En otras palabras, es el nombre con el que quieres que te conozcan.
El nombre comercial, es un título de propiedad intelectual que otorga el derecho exclusivo a utilizar en el mercado una denominación o signo como elemento de identificación de una empresa. Esto es lo que tiene en común el nombre comercial y la marca: son distintivos que diferencian tu actividad y se deben proteger mediante títulos expedidos por el Estado, en concreto a través de la Oficina Española de Patentes y Marcas. Es recomendable registrar la marca o nombre comercial antes de crear la sociedad.
Por tanto, recapitulando, cuando vas a poner en funcionamiento una empresa es de obligado cumplimiento que inscribas a tu empresa con razón social, porque es el proceso a través del cual adquirirá forma jurídica y es entonces cuando podrá operar.
Dependiendo de tus líneas de negocio y estrategia comercial podrás dirigirte a la Oficina Española de Patentes y Marcas para registrar el nombre comercial de tu empresa o alguna marca de algún producto o servicio. Puedes tener también diferentes nombres comerciales que identifiquen secciones distintas de actividad.
Por ejemplo, tu empresa puede dedicarse al desarrollo de aplicaciones. Su razón social podría ser APP Spain, aplicaciones para Smartphone, S.L. Pero si quieres que tu nombre sea más fácilmente reconocible puedes inscribir tu nombre comercial como APP Spain.
Si tienes más secciones de actividad, como por ejemplo, una que desarrolle aplicaciones de salud, otra de compras y otra de viajes, podrás crear, bajo la propiedad de APP Spain, aplicaciones para Smartphone, S.L., tres nombres comerciales diferentes, como APP Spain Health, APP Spain Shopping o APP Spain Travel. Para diferenciar tus productos o servicios puedes recurrir a registrarlos bajo marcas. Por ejemplo, una aplicación de salud puede registrarse como ‘En forma APP’.
Es imprescindible que antes de crear tu empresa, tengas claro cuál va a ser tu nombre comercial o marca para desarrollar la estrategia de comunicación de tu empresa. Para ello, deberás realizar un plan de comunicación integral en que se defina la identidad corporativa de la empresa, con las marcas, logos y colores que se van a utilizar, par que el público no perciba de forma difusa nuestro negocio o productos. Conoce toda la información necesaria sobre el plan de comunicación de una empresa y consigue tus objetivos de comunicación.
